Pedro Sánchez ha hecho bandera en el Congreso de la "justicia fiscal" para lograr que el sistema no beneficie a quienes más tienen. Para ello, el presidente del Gobierno ha anunciado un completo paquete de medidas que conllevan una reforma fiscal que llegará antes de que acabe el año.
El objetivo es lograr que "el sistema fiscal de España sea de primera división", ha dicho el presidente del Gobierno. Así que tal y como se había venido anunciando por parte de los distintos miembros del Ejecutivo, se va a subir el impuesto de sociedades a las grandes corporaciones. El objetivo es que "el tipo efectivo se acerque al nominal y, en ningún caso, sea inferior al 15%".
También se va a poner en marcha la llamada tasa Google o impuesto a las tecnológicas. Una imposición para acabar con aquello de que las "las tecnológicas no pagan impuestos", para lo que se va a medir el impacto que tienen en la economía real. Una tasa que, lo más probable, esté basada en los ingresos que generan plataformas como Google, Amazon o Facebook por sus operaciones en nuestro país.
Sánchez también ha anunciado en el Parlamento que se va a crear "impuesto finalista" a la banca para que "complemente las cotizaciones a la seguridad social y contribuya a mantener la dignidad de las pensiones de nuestros mayores". Y, por último, también se van a crear "algunas figuras que ayuden a desincentivar las malas prácticas medio ambientales".
Prohíbe las amnistías fiscales
El presidente del Gobierno también se ha referido a la amnistía fiscal llevada a cabo por el Ejecutivo de Rajoy, una medida que fue "un fracaso moral y recaudatorio", ha dicho. Así que se ha comprometido en el Parlamento a desarrollar un completo programa de "prevención y lucha contra el fraude".
En ese programa que se pondrá en marcha en las próximas semanas se va a presentar un anteproyecto de ley para "perseguir a los grandes defraudadores, prohibir futuras amnistías e incluir a los responsables solidarios de la morosidad a la hacienda pública y, por último, actualizará la lista de paraísos fiscales".
Las medidas en torno a la amnistía fiscal vienen después de que el Gobierno se haya encontrado con la imposibilidad de poder publicar los nombres de las personas que se acogieron a la amnistía lanzada por Montoro, dado que no se puede efectuar con carácter retroactivo.
Medidas de fomento del empleo
Sánchez también ha expresado su compromiso para lograr "un empleo digno", después de que los salarios y la calidad del empleo se hayan visto reducidos por "la merma del poder de la negociación de los trabajadores favorecida por la reforma laboral".
Así que para ello se ha propuesto conseguir que los salarios recuperen el peso que tenían en la renta nacional antes de la crisis, algo en lo que "contribuirá" el acuerdo alcanzado entre la patronal y los sindicatos.
También se va a aprobar antes de terminar el mes de julio un "plan director contra la explotación laboral". En él se intentará "erradicar la desregulación de las condiciones de trabajo y la precariedad laboral". De hecho, este mismo verano "habrá planes de choque contra los fraudes en temporalidad", ha anunciado el presidente del Gobierno.
El Ejecutivo de Sánchez abogará también por el rediseño de las políticas activas de empleo, que según ha dicho, se tienen que anticipar a las formas de trabajo de la Industria 4.0. Para ello ha reclamado "sintonizar la oferta y la demanda de las nuevas competencias laborales".