Caixabank también se suma a la lista de entidades financieras que no ve nada claro que sea necesario poner en marcha un impuesto a la banca. Su consejero delegado, Gonzalo Gortázar, cree que lo más importante ahora es reducir el déficit público porque es “la mejor receta para mantener el Estado del Bienestar”. Un esfuerzo que “no tiene que estar dirigido a la banca exclusivamente”, ha afirmado.
Gortázar no ha querido entrar a valorar el futuro impuesto a la banca, dado que todavía no se conocen los detalles. En cualquier caso, sí considera importante que las cuentas públicas se cuadren porque “habrá otra crisis y es importante que estén en orden para apoyar a la sociedad”, tal y como se ha hecho en los últimos años, algo que ha permitido ayudar a muchas personas durante los años más duros de la crisis.
Desde Caixabank recuerdan que pagan en torno al 23% de tipo efectivo en el Impuesto de Sociedades, y que efectúan una “notable” contribución a las cuentas del Estado a través de distintas vías: tasas a los supervisores, impuesto estatal de depósitos, el IAE, cuotas a la Seguridad Social, etc. Eso sí, Gortázar asegura que por ahora no se plantean llevar a cabo ningún cambio de su estructura legal ni fiscal de cara a futuro.
Cataluña
Gortázar no se muestra preocupado por la inestabilidad política que vivimos en este momento. A su juicio, lo importante ahora es entender que “es un factor con el que tenemos que vivir”. Muestra de ello, ha dicho, es que llevamos creciendo tres años por encima del 3% y este año creceremos en el entorno del 2,8%. Por tanto, “debemos acostumbrarnos a que las mayorías políticas ahora son menos estables y se puede crecer de forma relevante”.
También se le ha preguntado a Gortázar sobre la situación en Cataluña y el proceso de acercamiento entre Generalitat y el Gobierno Sánchez. Algo “positivo, porque todo lo que vaya por la vía del diálogo es bueno,aunque es un camino largo y no exento de dificultades”, ha sentenciado.
Esta valoración de Gortázar llega tras la presentación de resultados de Caixabank, en donde ha anunciado que presentará un nuevo plan estratégico en noviembre, y ha descartado la posibilidad de participar en algún nuevo proceso de compra. “Estamos centrados en el crecimiento orgánico”, ha explicado, aunque sí entiende que pueda haber entidades que quieran optar por procesos de consolidación “para mejorar la rentabilidad”, algo que cada vez es más complicado en un entorno de tipos bajos como el que vivimos.
También ha descartado seguir ampliando su expansión internacional más allá de Portugal. La entidad cuenta con más de 30 oficinas de representación en el exterior y “es la apuesta de cara a los próximos años”, dado que “no tiene sentido replicar una estructura de banca minorista como la que hay en España y Portugal porque no tenemos las mismas ventajas competitivas.