Hace dos días, Juan Leocadio Muñoz Tamara, empresario de la construcción y marido de la presentadora Ana Rosa Quintana, se mostraba resignado en las redes sociales por el fin de sus vacaciones: "Mañana toca #demadridalcielo es lo que hay, resignación", escribió en Instagram acompañado de una foto de la noche de luna llena. Parecía una suerte de presagio de lo que estaba a punto de desencadenarse.
Este martes, el empresario ha sido detenido en Madrid a instancias de la Fiscalía Anticorrupción por su relación con el excomisario Villarejo, acusado de delitos de descubrimiento y revelación de secretos y extorsión. En la intervención, desarrollada en el marco de la operación Tándem y que corre a cuenta del departamento de Asuntos Internos de la Policía Nacional, también han sido arrestados su hermano Fernando, en Andalucía, y el abogado de ambos. Los investigadores también han llevado a cabo registros en domicilios e inmuebles relacionados con el investigado, así como en Sotogrande y Marbella.
Pero más allá de ser el marido de una de las caras más conocidas de la televisión española, ¿quién es Juan Leocadio Muñoz Tamara? El arquitecto era el consejero delegado de la sicav Argomaniz Inversiones hasta que el pasado mes de abril se resolvió su disolución. Ana Rosa, por su parte, era la presidenta de la sociedad de inversión de capital variable que cerró 2017 con un patrimonio de 11,21 millones y un último beneficio anual de 373.401 euros.
En 2013, Argomaniz gestionaba 6,5 millones de euros y en cuatro años el matrimonio formado por Ana Rosa y Juan Muñoz -llevan más de 21 años juntos- consiguió duplicar esta cifra. La sicav registraba inversiones financieras en activos extranjeros correspondientes a empresas como Amazon, Facebook, Siemens, Walt Disney, Daimler (Mercedes), Atlantia, Telecom Italia o Pandora. Hasta su cierre, BNP Paribas Securities era la depositaria de la entidad, mientras que la gestión recaía en el banco suizo Lombar Odier.
Sin embargo, desde abril de este año, la sicav se ha transformado en una Sociedad Limitada que tiene como objeto social la adquisición, tenencia, administración y dirección de títulos. El capital social de la nueva sociedad es de 8,6 millones de euros y Ana Rosa y Juan Muñoz siguen actualmente en sus cargos de consejero delegado y presidenta respectivamente.
Pago de comisiones a políticos
Juan, sin embargo, no es el único de los Muñoz Tamara que tiene algún tipo de relación con Argomaniz Inversiones: su hermano Fernando también figura como consejero de la empresa. El hermano del arquitecto también ha sido detenido este martes y no es la primera vez que ambos se ven envueltos en algún tipo de problema con las autoridades. La dupla de empresarios andaluces formó parte de la lista de 15 personas que el juez imputó en 2009 por una supuesta trama de corrupción urbanística localizada en la localidad granadina de Alhendín, en aquel entonces gobernada por el Partido Popular.
El fiscal acusó a los dos constructores del grupo Tarje -Juan era el propietario- y a otras personas de apañar las condiciones, previo pago de comisiones al exconcejal de urbanismo, Manuel Fernández, de las obras de un parque por un valor de en torno a dos millones de euros y por la tramitación del polígono de Marchalhendín, con más de 3,2 millones de metros cuadrados recalificados. En unas escuchas grabadas, los hermanos Muñoz Tamara le dicen al entonces concejal: "Si nos dan cariño, damos mucho más cariño".
Polémico proyecto urbanístico
Juan Leocadio Muñoz Tamara es un arquitecto que ha levantado grandes complejos por toda la costa mediterránea y dirigido diversas empresas del sector de la hostelería y el turismo. No obstante, algunas de sus acometidas urbanísticas han generado bastante polémica y rechazo social, como la construcción a través del Grupo GMT de 1.400 plazas de hotel y 350 viviendas de lujo en la zona de Valdevaqueros (Tarifa), una de las grandes playas de la costa de Cádiz.
El proyecto, aprobado bajo la denominación de SL1 Valdevaqueros y años después de la explosión de la burbuja inmobiliaria, provocó una tremenda movilización nacional en las redes que estuvo abanderada por asociaciones ecologistas con el lema de 'Salvemos Valdevaqueros'. Este bando señalaba que "esta macrourbanización afectaría gravemente a una zona virgen del litoral de altísimo valor ecológico y paisajístico". Por su parte, desde el Ayuntamiento de Tarifa se defendía que se trataba de un desarrollo urbanístico al norte de la N-340, "blando" y opción de "turismo sostenible".
Finalmente, en mayo de este mismo año, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) estimó el recurso contencioso-administrativo interpuesto por Ecologistas en Acción contra el acuerdo del Pleno del Ayuntamiento Tarifa (Cádiz) de 29 de mayo de 2012 por el que aprobó el Plan Parcial SL1 Valdevaqueros, procediendo a anular dicho Plan Parcial.
Chantajes a través de Villarejo
Juan Muñoz Tamara se ha visto envuelto ahora en otra serie de negocios turbios que le han empujado al calabozo. El empresario está acusado, junto a su hermano Fernando y el abogado de ambos de contratar al excomisario Villarejo para que investigase a una persona que les debía dinero y chantajearla después. La Fiscalía ha informado de que los delitos que se les imputan son descubrimiento y revelación de secretos y extorsión, dentro de unas diligencias que son secretas.
La Policía, en concreto desde el departamento de Asuntos Internos, ha intervenido a petición del juez de la Audiencia Nacional Diego de Egea el mismo día en el que se han archivado dos piezas de la operación Tándem -Iron y Land-, que investigaban a dos clientes de Villarejo. Precisamente han sido unas grabaciones incautadas al excomisario el origen de las acusaciones contra Muñoz, su hermano y su letrado.
Villarejo, por su parte, tuvo que dar explicaciones ante el juez la semana pasada sobre las cintas de Corinna, las conversaciones, reveladas por EL ESPAÑOL, que la empresaria alemana mantuvo con el excomisario sobre las supuestas irregularidades cometidas por Juan Carlos I.