La ruptura es consecuencia de la reciente toma de control de Hispania por parte del fondo estadounidense a través de una OPA.

Se da la circunstancia de que Azora, firma de inversión y gestión de activos inmobiliarios controlada por Concha Osácar y Fernando Gumuzio, fue la promotora de Hispania, primera socimi que se constituyó y salió a cotizar en España en marzo de 2014.

Azora dejó el pasado mes de mayo en suspenso sus anunciados planes de salir a bolsa este año después de que Blackstone anunciara su OPA por Hispania. Precisamente, esta operación transcendió mientras la socimi celebraba una junta en la que se aprobaban cambios en el contrato de gestión permitirían a Azora saltar al parqué.

De su lado, Blackstone ya avanzó su intención de romper el contrato por el que Azora se encargaba de gestionar la cartera de hoteles, oficinas y viviendas con que cuenta Hispania.

Así lo indicó en el folleto explicativo de la OPA que lanzó sobre esta socimi, en el que cifró en 173 millones el importe que debería abonar por la rescisión anticipada de este contrato.

El pago final será no obstante un 30% superior, según el acuerdo de ruptura alcanzado, comunicado este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

En virtud de este acuerdo, Hispania pagará 225,53 millones de euros, de los que 33,69 millones corresponden a los honorarios base por gestión de activos que Azora habría recibido de mantenerse el contrato hasta su término, y los 190,83 millones restantes, a las comisiones y bonus adicionales por rendimiento que el contrato reconoce para supuestos, como el actual, de cambios de control de la firma.

Las dos empresas han convenido en que Azora siga "cooperando de forma transitoria" con Hispania para garantizar una "transición ordenada" de la gestión de sus activos.

De su lado, la socimi debe someter la ruptura de este contrato a la aprobación de una junta que espera celebrar antes del próximo 30 de septiembre.

SEPARAN SUS CAMINOS

Hispania cuenta con una cartera patrimonial valorada en 2.811 millones de euros, en la que figuran 46 hoteles que sitúan a la firma como primer propietario de establecimientos de este tipo del país. Además cuenta con edificios de oficinas y viviendas en renta que actualmente vende al por menor.

De su lado, Azora, no es una promotora o una patrimonialista, sino que se encarga de gestionar activos inmobiliarios de terceros, si bien cuenta con una filial con más de 11.000 de pisos en renta repartidos por toda España.

La firma dejó en mayo en suspenso el salto al parqué con el que pretendía fortalecer su balance e invertir en oportunidades. En concreto, se había fijado el objetivo de duplicar su cartera de activos en gestión en cinco años para que alcanzara los 8.000 millones, frente a los 4.400 millones con que cerró 2017.

Además de los activos de Hispania que gestionaba Azora, entre los clientes que le tienen confiada la gestión de sus carteras inmobiliarias figuran grandes fondos y patrimonios como George Soros, Fidelity, Cohen & Steers, Goldman Sachs, CBRE Global Investors, Axa Investment Management, Paulson & Co y Bank of Montreal.