Las responsabilidades empiezan a repartirse. La sociedad italiana pide investigaciones y culpables después del derrumbe del puente italiano. Y durante este miércoles los políticos italianos apuntaban a dos principales protagonistas: la Unión Europea y la concesionaria.

De hecho, el Ejecutivo italiano aseguró que estaba poniendo todas los esfuerzos para quitarle la concesión de las infraestructuras en Italia. Este motivo ha provocado pánico en los inversores y durante la jornada bursátil sus acciones se desploman casi un 25%. El pasado martes -día en el que se produjo el derrumbe-, sus títulos retrocedían más de un 5%. En conjunto del año, Atlantia cae por encima del 10%, su nivel más bajo de 2017.

La fuerte volatilidad se ha convertido en una constante durante estos dos días (este miércoles no hubo actividad bursátil en Italia) y durante varias fases de las jornadas sus acciones estuvieron suspendidas. De hecho, las acciones de la concesionaria permanecen inhibidas en la apertura de la Bolsa de Milán.

Por otra parte, los descensos en Bolsa de Atlantia también tienen su repercusión en España. ACS, socia de la empresa italiana tras la compra de Abertis, se desploma este jueves casi un 6%.

En este sentido, Atlantia, que posee el 88% de Autostrade -filial que tiene la adjudicación del puente- ha emitido un Hecho Relevante antes de la apertura de los mercados y ha asegurado que de rescindir el contrato, "se debe pagar al concesionario una indemnización igual al valor residual de la concesión".

A su vez, la empresa dirigida por la familia Benetton ha asegurado que el secuestro de la concesión a su filial puede tener repercusiones negativas en accionistas y bonistas de la compañía.