Los clientes son dos Tier 1 que operan en la zona Nafta, donde fabrican miles de piezas para las principales marcas de coche y cuyos nombres no pueden ser revelados por motivos de confidencialidad, según ha explicado hoy la compañía en un comunicado.
El primero de los acuerdos, que tiene un valor de 1,6 millones de euros, es el resultado de la confianza depositada por un cliente en Carbures Machinery, con la que empezó a colaborar en un proyecto el año pasado y que recientemente ha participado como socio de ingeniería.
Este nuevo encargo consiste en el desarrollo del proyecto para el diseño y fabricación de una línea de producción y ensayos de direcciones eléctricas, un producto que ya se utiliza en vehículos ligeros de pasajeros pero que supondrá un nuevo hito en el mercado de vehículos pesados.
El siguiente contrato que la compañía ha firmado es para otro cliente Tier 1 global por 2,7 millones de euros y reafirma la confianza depositada por este cliente en Carbures Machinery ya que se trata de la decimoquinta línea de estas características suministrada a plantas en Polonia, EEUU, México y China.
Este acuerdo es "muestra de la satisfacción del cliente con los trabajos realizados hasta el momento y también pone de manifiesto la capacidad de Carbures de continuar invirtiendo en I+D para la mejora constante de su productos y servicios", según la empresa gaditana.
El proyecto incluye el diseño y fabricación de una línea de montaje semiautomática y proceso de calibración y test automatizado de direcciones asistidas eléctricas para vehículos de pasajeros.
La línea de producción será instalada en la planta que este cliente tiene en Querétaro (México), un hecho que es diferencial a otros proveedores que ofertan este tipo de proyectos, ya que Carbures desarrolla el de llave en mano, que empieza con el diseño mecánico, seguido por la fabricación, montaje y programación, y acaba por la entrega de la línea preparada para la entrada en producción para cumplir la demanda del cliente.
El consejero delegado de Carbures, Borja Martínez-Laredo, ha afirmado que la compañía está "muy satisfecha porque estos dos contratos demuestran la tendencia positiva y de crecimiento a nivel local de este sector, así como la confianza que los clientes tienen en Carbures apostando por su tecnología y capacidad para crear soluciones globales de valor añadido".
Carbures abrió la planta de Querétaro para la producción en el sector automovilístico y dispone de una oficina de ingeniería con un centenar de especialistas en obra civil y 'oil&Gas' en Ciudad de México para la actividad de obra civil.
Sus instalaciones se componen allí de tres naves de producción con una superficie industrial de más de 1750 metros cuadrados, a los que hay que sumar unos 250 de oficina.
Alrededor de esta planta de automoción se concentran los principales clientes, actuales y potenciales, no sólo de México sino de una gran parte del mercado estadounidense.