Según indicó Lima Airport Partners (LAP), quien desde 2001 mantiene la concesión del principal aeropuerto de Perú, serán las empresas europeas las que se harán cargo de la construcción y la ingeniería de las nuevas obras, mientras que AECOM liderará el proyecto de diseño.
Esta selección se produjo tras nueve meses de estudio y calificación de propuestas en el que se tuvo en cuenta la experiencia de las empresas en proyectos de similares características.
Según indicó LAP, ahora la concesionaria evaluará el inicio de trabajos previos a las obras, como el impacto medio ambiental, servicios topográficos y geotécnicos.
"El objetivo es implementar una infraestructura que en los próximos años beneficie a millones de usuarios y contribuya con el desarrollo del país, cumpliendo con los principales objetivos asumidos por LAP: la construcción de la segunda pista de aterrizaje y el nuevo terminal de pasajeros", indicó el concesionario.
Este proyecto de ampliación tiene como objetivo convertir el aeropuerto de Lima en el "más grande y moderno de la región", según afirmó en julio de 2017 el entonces ministro de Transportes y Comunicaciones (MTC), Bruno Giuffra, tras firmar el contrato entre el ministerio y LAP que habilitó la ampliación del mismo.
Las obras previstas incluyen la construcción de una segunda pista de aterrizaje, que deberá quedar lista en cuatro años, además de una nueva terminal aérea, que debe estar construida en 2022.
Según anunció también el año pasado Fraport, la sociedad gestora del aeropuerto de Francfort, y socia mayoritaria en LAP, la inversión requerida será de unos 1.500 millones de dólares para este proyecto.