Las acciones de Mediaset España aflojan su remontada al 10% después de haber llegado a subir un 20% hasta los 7,25 euros por acción en máximos intradía. La compañía se disparaba entre rumores sobre una posible oferta de exclusión por parte de su matriz Mediaset, controlada por la saga que encabeza el ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, que se aprovecharía así del desplome que su rama ibérica acumula en lo que va de año. El desmentido de la transalpina a través de un portavoz en declaraciones a Reuters, ante la pasividad total de la  Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ha enfriado la euforia oportunista desatada sobre el valor.

A media sesión ya habían cambiado de manos más de 1,5 millones de títulos de Mediaset España, cuando su media diaria para una jornada completa no sobrepasa las 890.000 acciones en el último año. Fiebre bursátil ante el resurgir de un rumor al que ha dado alas Bloomberg, en una información en la que cita fuentes conocedoras del interés de la matriz italiana.

Los últimos datos publicados revelan que la audiencia de Mediaset retrocedió en agosto un 2,8% hasta una cuota del 27,5%. Pese a que el grupo que engloba Telecinco y Cuatro sigue líder frente a sus competidores, Atresmedia le pisa los talones con una cuota del 26,5% tras sumar medio punto porcentual. Además, Antena 3 le ha arrebatado a Telecinco la primera posición en el ranking de audiencias 18 meses después.

Los analistas de Renta 4 hacen notar que la televisión de pago sigue creciendo y en agosto ha registrado sus mejores cifras desde abril de 2017. Con este panorama, pronostican malos tiempos para Mediaset cuya recomendación está en revisión. Hasta ahora aconsejaban infraponderar y sitúan su precio objetivo en 9,3 euros, todavía con potencial alcista.

Hasta el acelerón de este lunes, la rama española del grupo de medios italiano era el segundo peor valor de todo el Ibex 35. Su caída del 35% tan solo lo superaba Dia, con más de un 50% de retroceso desde enero. La creciente competencia de las nuevas plataformas de contenido digital y el escaso ritmo de recuperación de los ingresos por publicidad han lastrado su cotización en los últimos meses, y con más fuerza que para su rival directa, Atresmedia, que cedía un 32% de su valor.

Los Berlusconi, a través de Mediaset Italia, controlan un 52% del capital social de la filial española. Las acciones que escapan de su cartera estarían valoradas en cerca de 950 millones de euros, según precios de cierre en bolsa de la semana pasada. Una cifra a la que habría que sumar la correspondiente prima en caso de que llegase a concretarse una operación desmentida y que, según las primeras informaciones, por ahora estaría en fase de estudio "incipiente".