Este lunes 10 de septiembre se abría un histórico episodio en la historia de las telecomunicaciones. Lo hacía en el juzgado mercantil nº 7 de Madrid, en plena Gran Vía. En este edificio se han tenido que personar el presidente de Vodafone España, Francisco Román y su consejero delegado, Antonio Coimbra.
Pero no han sido los únicos, nombres como el de Pablo de Carvajal, secretario general de Telefónica, también han tenido que testificar en uno de los casos que pueden marcar un antes y un después en el sector. La 'teleco' española se ha personado en la sesión de este lunes ya que Huawei también utilizó los servicios, teóricamente plagiados, con la ‘teleco’ española. De Carvajal ha tenido que dejar constancia la relación entre la empresa china y la española. Así, ha dejado caer que no hubiese hecho lo que su rival, pero que si se escucha su testimonio durante su comparecencia no lo dejó de manera manifiesta.
ToT Power Control, una división de la compañía Top Optimized Technologies, estuvo desarrollando una serie de mejoras para mejorar la eficiencia espectral de los entornos 3G, un algoritmo que agiliza la red móvil y permite que, en un entorno muy saturado de llamadas, las distintas conversaciones no se interfieran y tengan la misma calidad a lo largo de toda la llamada. Simplificando: mejorar el rendimiento de las conversaciones telefónicas cuando existe una aglomeración exagerada de personas -como en estadios de fútbol- o cuando alguien habla en entornos complicados como túneles o ascensores.
En este sentido, ToT registró una serie de patentes en el año 2002. Fue en 2010 cuando la startup española llegó a un acuerdo con Vodafone para desarrollar estos avances tecnológicos. Dos años más tarde, la empresa española estrechaba lazos con Huawei, con la ayuda de la ‘teleco’ británica para seguir creciendo.
Esta alianza se derrumbó en 2015. Vodafone informó a ToT que ya no estaba interesada en el modelo, ya que Huawei había desarrollado por su cuenta una solución alternativa. La startup, dirigida por Álvaro López-Medrano, encontró indicios de que tanto Vodafone como Huawei habían plagiado sus patentes. A partir de ahí comenzó un largo recorrido hasta encontrarnos en la situación actual, en mitad de un proceso judicial en el que la ‘teleco’ y la proveedora se enfrentan a una indemnización de hasta 500 millones de euros.
López-Medrano narra la historia
A eso de las diez de la mañana, y con una sala de bote en bote, el primero en declarar fue López-Medrano. Durante casi hora y media ha explicado al juez en qué se basaba la tecnología, cómo llegó hasta las oficinas de Vodafone o los varios viajes en los que tuvo que ir hasta China para cerrar los acuerdos con Huawei.
El representante de ToT contó como trabajaban con Vodafone, con Telefónica, con Huawei y con otras grandes firmas del mundo de la tecnología. De hecho, López-Medrano ha narrado los proyectos en los que trabajó con la ‘teleco’ británica. “Llegamos a probar nuestro proyecto en el sur de Madrid, incluso en el Vicente Calderón durante una semana para saber qué porcentaje de ganancias en la calidad de las llamadas podíamos generar”. El dueño de la startup aseguraba que el índice era superior al 30%.
Algo que desecharon los responsables técnicos de Vodafone. Durante el juicio los expertos de la multinacional de telecomunicaciones indicaron que el fin de colaboración llegó porque pensaban que no se aportaban “cambios significativos” y Huawei ya había trabajado en un programa similar.
Por su parte, Santiago Tenorio, director de arquitectura y estrategia de la red de Vodafone, aseveró que “tras realizar las pruebas necesarias llegaron a la conclusión de que las mejoras que ofrecía no compensaban el elevado coste de implantarla”. Tenorio reconoció que la solución de ToT ofrecía ganancias de hasta el 29% pero no eran suficientes. Sin embargo, según un contrato entre las partes al que tuvo acceso EL ESPAÑOL quedaba claro que bastaba con un 20%.
Los altos cargos de Vodafone desconocían la operación
Por los micrófonos de la sala de la madrileña calle de Gran Vía tuvieron, como se ha mencionado anteriormente, dos de los pesos pesados de Vodafone en España. El presidente de Vodafone España, Francisco Román, ha asegurado que desconocía los términos del contrato que habían firmado las compañías puesto que se debían a factores técnicos que no tiene por qué conocer”.
Por su parte, Antonio Coimbra -que apenas estuvo sentado unos quince minutos- tampoco conocía la actividad que desarrollaba ToT dentro de las paredes de Vodafone. “Yo en aquellos entonces pertenecía a Vodafone Portugal y ocupaba un cargo de ventas y Marketing”, argumentó.
Telefónica investigó el caso
Otra de las grandes ‘telecos’ que tuvo relación -en mayor o en menor medida con ToT- fue Telefónica. “ToT se pone en contacto con nosotros y nos cuenta el problema ya que nosotros también trabajamos con Huawei (proveedor técnico) y teníamos acuerdos estratégicos en Sudamérica y Alemania”, subrayó.
Fue entonces cuando De Carvajal ordenó que se realizara una investigación para aclarar lo sucedido. “A mí, lo que me dijeron desde dentro de Telefónica, es que Huawei nos ofreció el mismo servicio que ToT de manera gratuita. Y claro, si es gratis nosotros decidimos que nos lo hicieran ellos”, finalizó.
El proceso aún no ha quedado visto para sentencia. El próximo lunes pasarán por el juzgado directivos de Huawei y también peritos que determinarán si hubo o no un posible plagio. El 1 de octubre será la vista final y será entonces cuando se conozca la sentencia.