Este jueves CaixaBank oficializaba que venderá su participación en Repsol perdiendo 450 millones de euros. Con esta operación, según informaba la entidad bancaria, obtendrá un total de 2.500 millones de euros por la participación en la energética.
Este hecho se produce apenas semanas después de que anunciase el nuevo plan estratégico y, según fuentes del sector, Caixabank tenía en su hoja de ruta abandonar a la petrolera a pesar de que este hecho le reporte unas pérdidas de 450 millones de euros.
Como la operación se hizo fuera del horario de mercado, las acciones de una y otra empresa no sufrieron ningún tipo de variación. Pero en la apertura del viernes los títulos de Caixabank y Repsol han pagado caro la huida de la entidad bancaria de la petrolera.
Así, las acciones de Caixabank caían más de un 2,5% y su cotización se queda cerca de los 4 euros. El adiós a Repsol rompe una tendencia positiva de todo el mes de septiembre en el que los títulos de la entidad no han dejado de revalorizarse hasta casi un 5%.
Este hecho no ha sido impedimento para que los analistas de Credit Suisse apueste por Caixabank. En un informe realizado por los expertos de la entidad suiza se resalta la labor de la banca europea y destaca precisamente a Caixabank.
Según se extrae del dossier, las entidades “están mucho más expuestos a la mejora de los precios del real estate, pues el 90% de los activos/colaterales de préstamos está relacionadas con inmobiliario, y los precios del real estate en la mayoría de los países del euro se está recuperando”. A su vez, creen que “tiene un gran potencial en la banca digital y es mucho más sensible a los movimientos de tipos que los bancos de inversión”.
Los inversores también están retirando su apuesta por Repsol y es que, al igual que Caixabank, está dejándose más de un 2% en la sesión de este viernes y los títulos se quedan en los 16,5 euros. Al igual que la entidad bancaria, septiembre ha sentado bien a la petrolera sobre el parqué y sus acciones se revalorizan casi un 2%.
Una buen ciclo del Ibex
Las caídas de estas dos grandes del parqué español no ha impedido que el Ibex 35 siga con su buen momento. En la apertura del selectivo el verde se volvía a imponer al rojo (+0,5%) y busca afianzarse en los 9.600 puntos.
De conseguirlo, el Ibex 35 cerrará una semana entera en positivo y lograría llegar a los diez días consecutivos con subidas.