El pleno del Parlamento Europeo (PE) dio hoy luz verde a las nuevas normas para los servicios audiovisuales que obligarán a plataformas como Netflix a ofrecer un mínimo del 30% de producción europea en sus catálogos.
La directiva, que se aplica también a cadenas tradicionales, prevé igualmente medidas de refuerzo para la protección a los menores y limitaciones al tiempo de publicidad (un 20% de la emisión diaria).