Los inmuebles construidos proceden todos ellos de la cartera que aportó Axiare, la socimi con la que Colonial se fusionó tras hacerse con su control a través de una opa, según informó la compañía.
Se trata de edificios que no encajan en la estrategia de la compañía que dirige Pere Viñolas, centrada en gestionar una cartera a edificios de oficinas situados en el centro de las ciudades de Madrid, Barcelona y París.
Colonial destinará el importe que obtenga de esta desinversión a continuar con esta estrategia de crecimiento, toda vez que después de la operación su endeudamiento será "claramente inferior" al 40% del valor de sus activos.