En concreto, el banco noruego tiene repartida su actual participación del 4,8% entre un 2,28% de forma indirecta, equivalente a un total de 14,05 millones de acciones, y un 2,5% restante a través de instrumentos financieros.
El fondo Letterone, en el que participa el millonario ruso Mikhail Fridman, se mantiene como máximo accionista de la compañía con un 29% del capital social, lo que le sitúa en el umbral del 30% que establece la obligación de lanzar una OPA por el 100% de la compañía, seguido por Goldman Sachs (15,17%) y Baillie Gifford & Co. (5,62%), que también redujo hace unas semanas su participación en la compañía.