En su intervención en el encuentro empresarial CEOE-Cpyme, ha resaltado que esta fusión les convierte en "el primer operador de pizza nivel mundial", pues supondrá contar con 2.200 tiendas en 37 países y un mercado potencial de 1.500 millones de consumidores.

"Nuestra alianza con Pizza Hut nos permite un salto cualitativo de 20 años" y permitirá duplicar la ventas del grupo, un objetivo que en solitario "era impensable", ha resaltado.

Ha definido la operación como "valiente y sensata", a pesar de contar con las "incertidumbres de toda operación transformacional".

La alianza con Yum Brands -propietaria no solo de Pizza Hut sino también de las marcas Taco Bell y KFC- fue autorizada en junio por los accionistas de Telepizza.

Este pacto hará que el grupo español se sume a la gran liga mundial de cadenas de pizzerías, al pasar de 1.600 a 2.560 locales, de 560 a 1.100 millones de euros anuales de facturación y de 20 a 37 países.

A preguntas de los asistentes, el presidente de Telepizza se ha referido a la situación económica general y a la situación del consumo; sobre este asunto, ha asegurado que su compañía detecta cierta "desaceleración" por la caída de pedidos a finales del mes, una situación que es común en "épocas de crisis".

Según el empresario, lo que se observa "no es nada dramático", pues estas situaciones de desaceleración del consumo se deben a veces a que "el consumidor es miedoso".

El grueso de su intervención ha versado sobre las claves de la transformación del sector de la restauración, con el delivery y la digitalización como principales vectores del cambio.

Ha hecho repaso a la evolución del sector y de su propia empresa en el entorno digital, hasta el punto de que el 30% de los pedidos a su compañía se hacen por dispositivos electrónicos, que desbancan a otros más tradicionales como los pedidos en restaurante o por teléfono.

A su juicio, este cambio en las preferencias del consumidor debe llevar aparejada un transformación integral de la compañía para adaptarse a estas tendencias "imparables".

Ha vaticinado la proliferación de las conocidas como "dark kitchen" -espacios donde solo se cocina y se organiza el reparto de comida- y que será más habitual pasar por restaurantes con apenas comensales pero con un buen número de repartidores en la puerta.

La causa del repunte de los pedidos a domicilio es múltiple, pero tiene como base la falta de tiempo libre que hace muy útil este tipo de restauración que te sirve la comida "en bandeja", ha apuntado.

También ha remarcado la evolución hacia el "hogar como centro de ocio", con realidades como el despegue de las series que "ha devuelto a la pantalla del salón" a una generación que se había marchado a los entornos digitales o al videojuego.

Y por supuesto, "la conectividad permanente" del consumidor ha sido otra de las causas que ha subrayado de este repunte del "delivery".

Como ejemplo, ha indicado que sólo en España las ventas digitales de su grupo han crecido un 15% y que el 60% de los pedidos se ha hecho a través del algún dispositivo móvil.