El Ibex 35 camina despacio, pero camina, hacia una situación de menos desigualdad en los consejos de administración. Todavía está lejos de las recomendaciones de la Ley de Sociedades de Capital o del Código de Buen Gobierno, que promueven alcanzar un 30% de representación femenina, pero algunas empresas se acercan a esta cifra o la superan. Incluso hay una que ya ha alcanzado una situación de igualdad.
El último informe de la asociación WomenCEO, con datos a 1 de octubre de 2018, aborda esta situación y establece un ránking que lidera Cellnex, con el único consejo paritario; seguido de Red Eléctrica, con un 41,7%. Iberdrola y Siemens Gamesa completan el top 5, ambas con un 35,7%.
Sin embargo, lo importante es que hoy hay muchas más empresas que tienen entre un 20% y un 40% de mujeres en los consejos. Santander (33,3%), IAG (33,3%), Inditex (33,3%), Merlin (33,3%), Mediaset (30,8%), Grifols (30,8%), Bankinter (30%), Caixabank (27,8%), Acciona (27,8%), Dia (27,3%), BBVA (26,7%), Mapfre (26,7%), Enagás (23,1%), Indra (23,1%), Acerinox (21,4%) o Repsol (21,4%) van mejorando la representatividad. Dicho esto, aunque estos porcentajes son muy llamativos, ninguna empresa del Ibex tiene más de 5 consejeras.
Aunque todavía tienen camino por recorrer, hemos visto mejorar a en estos años a compañías como Endesa que han pasado de no tener ninguna mujer en 2012 a fichar a dos para alcanzar un 18,2%; a Telefónica, que ha pasado del 5,6% a 17,7% tras la incorporación a la presidencia de José María Álvarez-Pallete; o a ACS, que ha subido del 5,9% al 16,7%.
Hay cuatro empresas del Ibex 35 con sólo una mujer en el Consejo: Naturgy (que en 2006 tenía tres consejeras y un 17,7%), Bankia, Inmobiliaria Colonial y Técnicas Reunidas. La última tiene el peor porcentaje, del 7,1%, pero sólo porque de las cuatro empresas es la que tiene un consejo más grande.
De las consejeras, un 73% son independientes; un 18%, dominicales, un 7% presidentas, vicepresidentas o consejeras delegadas; un 7%, externas, y un 2% coordinadoras.
Los comités de dirección avanzan más despacio.
En los comités de dirección los resultados son peores. 60 mujeres representativas de un 14,4%. Y aunque Naturgy peca de pocas consejeras, lo compensa teniendo una mujer en un comité de dirección de cinco personas, lo que le pone en un 20%.
Bankinter no sólo tiene consejera delegada, sino también 5 mujeres en un comité formado por 13 personas. Colonial gana en porcentaje, con un 44,4%, en un comité de nueve directivos del que forman parte cuatro mujeres.
Curiosamente, la líder en mujeres en el consejo, Cellnex, no tiene ninguna mujer en su comité de dirección, mientras que la empresa con mayor representación en el comité de dirección, Colonial, sólo tiene una mujer en su consejo de administración.
La opinión de la cazatalentos
En este debate es clave la opinión de los headhunters o cazatalentos que, muchas veces, rastrean el mercado para las grandes compañías. Una de las más conocidas en España es Aurora Cata, de Seelinger y Conde, que además es consejera de Atresmedia y de Sabadell.
“Más allá de la regulación, que no dejan de ser recomendaciones, a la hora de valorar a un candidato ya no hay ningún presidente de ninguna comisión de nombramientos que no pida que entre los perfiles haya señoras”, explica la directiva.
En todo caso, pone mucho foco en que las necesidades de los consejos dependen mucho de cada empresa. “Un consejero debe aportar una cierta experiencia que sume a lo que estratégicamente quiera hacer la compañía. Tener background en tecnología, auditoría, remuneraciones o RSC tiene mucho recorrido”, señala, refiriéndose a necesidades que “pueden ser comunes a muchos consejos”.
“Si tienes un consejo con mucha experiencia en tecnología te piden a alguien que la tenga en RSC; si la estrategia de la compañía pasa por el crecimiento inorgánico, a alguien que tenga un perfil en fusiones y adquisiciones”, explica.
El proceso sería el siguiente: “Hacen un análisis más o menos objetivo de dónde quiere ir la compañía y de qué experiencias pueden sumarles en ese viaje. A partir de ahí te definen un perfil -financiero, experto en remuneraciones, RSC, auditoría, tecnología, etc-. Y aquí no hay excepción: todos te piden que haya señoras entre los candidatos que presentas. Y yo, si encuentro una que cumple con los requisitos, intento ponerla la primera de la lista”.
Para Cata, la clave es la experiencia. “Una determinada experiencia es necesaria, y no hablo de edad, hablo de una experiencia lo bastante intensa para que tu criterio sea de valor. Esa es la diferencia crucial entre un gestor y un consejero, que el consejero te ofrece un punto de vista sobre algo que él ya ha hecho”, indica.
Aunque para Aurora Cata hay muchos perfiles de mujeres que cumplirían perfectamente ese rol, “es mucho más revelador el número de CEOs que hay en el Ibex que el de consejeras, porque es de ahí de donde van a salir las futuras consejeras”. “¿Todo el mundo pide mujeres consejeras? Seguro. ¿Todo el mundo lo busca? También. Pero no vale con eso”, remarca.
A su juicio, para que deje de existir siquiera esta recomendación, porque ya exista un equilibrio, “es clave el número de mujeres en cargos directivos”. Para ella, el futuro debería pasar por lo que sucede cuando entras a una clase del colegio. “¿Te preguntas cuántos niños y niñas hay en cada clase? Nadie se lo plantea. Y así debe ser”.
Ponga una mujer en su consejo
Asimismo, hay ventajas objetivas a la hora de tener mujeres en los consejos y en la alta dirección. Un estudio de la Universidad de Oviedo basado en datos obtenidos de empresas cotizadas entre 2011 y 2015, demostraba que las empresas con representación femenina en los comités de remuneración introducen contención en el sueldo de los consejeros delegados y las subidas que éste experimenta. Un elemento valorado por las juntas generales de accionistas.
“Nuestros resultados apoyan la presencia de consejeras no sólo de forma simbólica o social, sino también por su contribución a mejores prácticas de gobierno corporativo”, señalaba el estudio.
Existen, para fomentar estas prácticas, iniciativas como Women to Watch de PwC, que en su tercera edición incorpora a directivas destacadas como Eva Fernández, consejera delegada de EL ESPAÑOL; Amalia Blanco, dircom de Bankia, o Alba Tous, presidenta de Tous.
En EEUU, un estudio de Catalyst entre las compañías del índice Fortune 500 revelaba que las compañías con mayor representación de mujeres en los consejos alcanzaban mejores resultados que aquellas con menor representación.
Otra publicación, liderada por Belén Fernández-Feijóo, de la Universidad de Vigo, señalaba también en 2014 que las compañías con tres o más consejeras experimentan resultados mejores que la media en sus informes de responsabilidad social corporativa.
La situación en Italia
En Italia, donde por ley es obligatorio que exista una proporción de una mujer por cada tres hombres en los consejos, se ha conseguido mejorar significativamente el número de consejeras, pero según un estudio liderado por Silvia Solimene, de la Universidad de Roma, ha habido una consecuencia indeseada: ha caído el número de directivas en los comités de dirección.
Este estudio también analizaba los perfiles elegidos para los consejos: italiana y muy educada. “Lo más probable es que estos altos niveles educativos se deban al hecho de que las mujeres aún son minoritarias en el mundo de los negocios y es necesario que demuestren más cualificaciones y títulos para asegurarse un nombramiento en un consejo”, señala el estudio.
Además, son mujeres con mucha experiencia profesional -como indicaba Aurora Cata-, con más de 51 años y que trabajan para varios consejos. También se ha visto que el número de consejeras accionistas ha caído, lo que implica que ya no sólo se elige a mujeres de las familias que controlan las empresas.
¿Y en el resto del mundo? Según un estudio de Deloitte, las mujeres ocupan el 15% de los puestos del consejo de administración en todo el mundo.