La compañía, que empezó a operar en 2017 y salió a bolsa hace trece meses, cerró el año pasado con 40,3 millones de euros de pérdidas, y continuó con resultado negativo de enero a marzo de 2018, cuando perdió 2,3 millones.
De abril a junio tuvo sus primeros resultados positivos (5,9 millones) y de julio a septiembre los beneficios fueron de 1,9 millones de euros.
El ebitda de los tres primeros trimestres de 2018 fue de 3,6 millones de euros.
Los ingresos del 1 de enero al 30 de septiembre alcanzaron los 55,4 millones de euros: la mayor parte de ellos en el tercer trimestre (40,7 millones).
El margen bruto en los nueve primeros meses del año fue del 29%.