El banco explicó que el descenso del beneficio se debe a los mayores gastos y los menores ingresos por tasas y comisiones y por actividades comerciales, que no pudieron ser compensados pese al efecto positivo del aumento de otro tipo de ingresos y las menores pérdidas por créditos deteriorados.

Por unidades de negocio, 1.089 millones de euros correspondieron a los beneficios generados en Bélgica, 484 millones en República Checa y 440 millones en la Unidad de Mercados Internacionales (Hungría, Irlanda, Eslovaquia y Bulgaria), mientras que registraron pérdidas de 62 millones en el Grupo Centro.

Los ingresos de la entidad fueron de 5.663 millones de euros, algo por debajo de los 5.882 obtenidos en el mismo periodo de 2017, con un aumento del 3 % en los ingresos netos por intereses (3.378 millones de euros), pero un descenso de la misma magnitud en los obtenidos por tasas y comisiones (1.312 millones).

Otros tipos de ingresos combinados cayeron un 26%, hasta los 455 millones, mientras que los gastos operativos aumentaron en un 6 %, hasta los 3.239 millones de euros.

El volumen de depósitos aumentó un 3%, hasta 146.011 millones, y el de préstamos subió también un 5%, hasta los 194.056 millones.

El margen de intereses en los nueve primeros meses de 2018 mejoró en cinco puntos básicos, hasta el 2%, mientras que la rentabilidad sobre recursos propios (ROE) se situó en el 16%, frente al 17% del mismo periodo de 2017.

La entidad elevó su ratio de capital de máxima calidad al 16,3%, frente al 16% previo.

KBC también publicó los datos del tercer trimestre, en el que obtuvo un beneficio neto de 701 millones de euros, un resultado ligeramente superior a los 691 millones registrados en el mismo periodo de 2017 y que fue calificado de "excelente" por el consejero delegado de la entidad, Johan Thijs.

Los ingresos totales aumentaron un 2%, hasta los 1.136 millones de euros.

El volumen de préstamos al consumidor aumentó un 5%, mientras que el de depósitos se incrementó en un 3% en la comparativa interanual.

KBC indicó que pagará un dividendo intermedio de un euro por acción el 16 de noviembre como adelanto del dividendo total con cargo a los resultados de 2018.

Además, recordó que ha llegado un acuerdo con Goldman Sachs para venderle parte de su cartera de créditos deteriorados en Irlanda, lo que ayudar a reducir "significativamente" el ratio de préstamos fallidos, según la compañía.