La agencia de calificación crediticia Moody's ha decidido rebajar a 'estable' desde 'positiva' la perspectiva de las empresas no financieras para 2019 de la región de Europa, Oriente Próximo y África por la "desaceleración" del crecimiento económico y el "aumento" de las tensiones comerciales, según se desprende de un informe publicado este miércoles.
"Uno de los factores claves de la calidad del crédito para la mayoría de las empresas calificadas es el entorno macroeconómico, en el que esperamos un crecimiento menor en muchos países del G20", ha asegurado el director general para Europa, Oriente Próximo y África de la división corporativa y financiera de Moody's, Phillipp Lotter.
La nueva perspectiva de la firma refleja, además, que se está perdiendo el "impulso" de 2018, cuando se registró un "sólido crecimiento". La caída será más acusada en los sectores ligados al petróleo, gas y en el de materias primas, debido a su exposición a la volatilidad de los precios del crudo.
Asimismo, aunque el contagio de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China debería de ser "modesto y manejable" para las firmas europeas, en opinión de Moody's, la posibilidad de que se produzca un Brexit sin acuerdo tendría un impacto especial en las firmas de los sectores aeroespacial, automotriz y químico.
La agencia de calificación también ha señalado como un riesgo a la baja la normalización de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), que se iniciará en 2019 y continuará a lo largo de 2020. Para Moody's esto afectará todavía más a la liquidez y las condiciones de financiación de los países emergentes, al mismo tiempo que la volatilidad retorna a "niveles normales".
Al aumento de los tipos de interés por parte de la autoridad monetaria presidida por Mario Draghi se unen los "altos niveles de deuda", la "falta" de herramientas políticas y el hecho de que los precios de los activos estén en "máximos".