La compañía, que reforzará su posición como Productor Independiente de Energía (IPP) en los próximos dos años, espera lograr un resultado bruto de explotación (Ebitda) de casi 33 millones de euros en 2020, tres veces más que el estimado para este año (10,5 millones de euros).
Asimismo, Grenergy prevé también triplicar sus ingresos en los próximos dos años, hasta alcanzar 146 millones de euros, frente a los 52 millones de euros de facturación con los que espera cerrar el ejercicio actual.
El objetivo de la compañía es alcanzar en 2020 los 350 megavatios (MW) solares y eólicos en operación, para lo que invertirá 340 millones de euros en proyectos propios de generación y venta de energía.
Grenergy prevé también ampliar en dos años su cartera de proyectos en desarrollo con hasta 5.000 MW distribuidos entre Chile, México, Colombia, Perú, Argentina y España.
Precisamente, de acuerdo con los planes de la energética, España se convertirá en su mercado principal en los próximos años, pues allí tiene su mayor cartera de proyectos, con más de 900 MW en distintas fases de desarrollo, repartidos entre Castilla-La Mancha, Andalucía y la Comunidad Valenciana.
"El plan de negocio que presentamos hoy es ante todo realista pues todos los proyectos tienen nombre y apellidos. El buen momento que viven las renovables en todo el mundo -el MW solar cuesta una décima parte de lo que costaba en 2008- es el catalizador de una compañía como Grenergy, que ha sabido gestionar acertadamente su política de rotación de activos para llegar al momento actual con el objetivo principal de potenciar aún más la inversión en plantas propias para la venta de energía a largo plazo", ha destacado el presidente ejecutivo y consejero delegado de la empresa, David Ruiz de Andrés.