Los seis grandes bancos que operan en el IBEX 35 -Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Sabadell y Bankinter- registran unas pérdidas conjuntas de capitalización que superan ampliamente la caída que acumula el indicador nacional, que se deja el 11,53% de su cotización en el año.
Un porcentaje similar al de otros mercados europeos, ya que Fráncfort también pierde en el año el 15,88%; Milán, el 13,47%; Londres, el 10,96%; y París, el 8,64%.
La guerra comercial entre EE.UU. y China, los bajos tipos de interés, la desaceleración económica a nivel mundial, la situación política y económica de Italia, o el "brexit" han marcado la evolución del mercado en 2018.
Además de estos factores, la banca española se ha visto lastrada por las dudas que siguen generando algunos bancos europeos como Deutsche Bank, o las crisis de algunos países en los que están presentes como México, Brasil, Turquía o Argentina.
A nivel doméstico, el impuesto a la banca que barajaba el Gobierno, o los cambios de opinión del Tribunal Supremo acerca de si era el banco o el cliente quien debía pagar el impuesto de las hipoteca, también han dañado la cotización del sector.
A falta de dos semanas para que termine el año, el Banco Sabadell es la entidad financiera del IBEX 35 que más pierde, ya que su cotización se ha reducido el 32,61%.
La entidad, que a cierre del pasado viernes, registraba una capitalización de 6.096 millones de euros (9.318 millones a cierre de 2017) se ha visto fuertemente penalizada en bolsa por su exposición al Reino Unido y la crisis del "brexit".
Además, la merma de sus beneficios por las fuertes provisiones llevadas a cabo o la crisis de su filial británica TSB, han lastrado su cotización.
Al cierre del pasado viernes, los títulos de Sabadell valían 1,08 euros.
La segunda entidad que se ha visto más castigada en Bolsa este año ha sido BBVA, que se deja más del 32% de su cotización, hasta los 4,71 euros por acción.
La capitalización bursátil de la entidad alcanza los 31.425,7 millones de euros, frente a los 47.422 millones de cierre de 2017.
La entidad que preside Francisco González se ha visto muy afectada por la crisis de Turquía, donde opera con el banco Garanti.
Igualmente, el rescate del FMI a Argentina ha penalizado este año a la entidad, que también ha acusado la posibilidad de que México -su principal mercado- barajase la posibilidad de recortar las comisiones bancarias.
De la misma manera, el Banco Santander también se ha visto arrastrado por la crisis de los mercados emergentes, el "brexit", o la depreciación del real brasileño.
La entidad financiera española acumula unas pérdidas en el año del 22,66%, mientras que su capitalización se ha reducido hasta los 65.910,6 millones de euros, 22.500 millones menos que al cierre de 2017.
Otro de los bancos peor parados del IBEX 35 ha sido Bankia, cuya acción cotiza a 2,76 euros.
La entidad nacionalizada cae en el año un 28,52%, pero eleva su capitalización bursátil hasta los 8.529,9 millones de euros, 1.642 millones más.
No obstante, el bajo precio de la acción de Bankia ha llevado a la ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, a dejar abierta la posibilidad de prorrogar el plazo de privatización de la entidad más allá de 2019.
Del resto de las entidades que opera en el IBEX 35, CaixaBank también sufre unas pérdidas del 9,27 % en el año, y alcanza una capitalización bursátil de 20.277 millones (23.261 millones a cierre de 2017), mientras que la mejor parada es Bankinter, que solo registra una caída del 4,79% de su cotización.
Pese a ello, la entidad ha perdido capitalización, ya que hace un año alcanzaba los 7.104 millones de euros, y en la actualidad, se ha reducido hasta los 6.585 millones.