Aunque su nombre no ha sonado en el caso, pues aún trabajaba en Endesa en el momento de los hechos, Carlos Torres es la cara de BBVA y quien ha tenido que salir a dar un mensaje de tranquilidad. A principios de esta semana declaró que su prioridad es “esclarecer” el escándalo y “actuar con la contundencia necesaria para resolver la situación”.
En una carta a los empleados, Torres asegura que todos en BBVA están "escandalizados” con el asunto y que de ser ciertas las informaciones, “se trataría de conductas indudablemente muy graves, deplorables, diametralmente opuestas a lo que somos y a lo que todos nosotros representamos y, en definitiva, a los valores de BBVA”, expone.
Torres recuerda en esa carta que la entidad inició el pasado junio una investigación sobre las informaciones publicadas a finales de mayo que apuntaban a que el banco había contratado y pagado diversos servicios al Grupo Cenyt, vinculado al excomisario Villarejo.
Desde el entorno del BBVA ha quedado claro que se actuará con una contundencia absoluta.