Conductores de VTC se manifestarán mañana martes a las 12 horas en la sede central de Podemos, situada en la calle Princesa de Madrid, bajo el lema "Somos trabajadores, no multinacionales", con el objetivo de visibilizar que "son trabajadores que cotizan en España y quieren seguir trabajando sin miedo".
Durante una rueda de prensa en la sede de UGT, diferentes empleados de varias empresas de chóferes, que trabajan mayoritariamente para las aplicaciones Uber y Cabify, han expuesto sus puntos de vista en este conflicto con los taxistas. Le ha introducido y presentado el secretario general de Transportes de UGT Madrid, Antonio Oviedo, que ha destacado que en Madrid trabajan 9.000 personas en este sector, muchos de ellos desde hace una década, "que pagan sus impuestos en España y sobre todo tienen la función vital de poder y querer trabajar".
Uno de ellos, Guillermo Cobos, de Vector Ronda, ha esgrimido que con la protesta en la sede de Podemos, en la calle Princesa número 2, junto al edificio España, quieren demostrarle que "son trabajadores, no multinacionales" y que sus nóminas "se pagan y cotizan en España", para contraponerlas a las declaraciones de la semana pasada de varios miembros de este partido a favor de los taxistas y en contra de las empresas VTC.
"Llevamos tiempo trabajando en esto y tenemos derecho a currar tranquilamente y desde hace tiempo no lo hacemos. Cuando hay cierre patronal en el taxi las incidencias se multiplican", se ha quejado.
En la misma línea, otro conductor, Francisco Antón, ha señalado "el daño psicológico y físico" que les están infringiendo algunos taxistas en la última semana. "Tenemos una franja de edad que no estamos abiertos al mercado laboral y hemos encontrado en las VTC nuestro medio de vida. Respetamos a todos los medios de transportes que hay y queremos que no nos impongan el medio de transporte que queremos utilizar", ha manifestado.
"Nosotros no hemos quitado trabajo a nadie. El soberano es el público y si ha caído la demanda del taxi no hay más razón que esa. Yo pertenezco a una empresa que desde el primer día he tenido una información, formación, contrato indefinido, trabajo de lunes a viernes, tengo vacaciones pagadas y no entiendo que se pretende demonizar a este sector. Pago mis impuestos que en España y solo que pido es trabajar", ha dicho Arnaldo Rodríguez, otro de los chóferes hoy convocados en la sede de UGT.
Arián Mora, también de Vector Ronda, ha subrayado que, al igual que los taxistas, "todos tenemos familias e hijos y todos lo estamos haciendo de forma legal". Su compañero, Eduardo García, ha comentado que gracias a esta empresa con 60 años tiene trabajo desde julio.
"Hace ocho meses vivía en la calle, durmiendo en el Metro de Gran Vía. Eché la solicitud y me llamaron al día siguiente para una entrevista y una semana después tenía trabajo. Me sentí útil por primera vez desde hace mucho tiempo porque mi autoestima estaba por los suelos. Estas empresas tributan en España y gracias a Dios me han dado un apoyo para poder llegar a mi edad de jubilación", ha explicado.
También ha tomado la palabra la conductora Paloma Blanco, de la empresa Moove, quien ha pedido a los taxistas "que les dejen trabajar" porque en los últimos días "sufren acoso y ellos y sus clientes pasan miedo". "Queremos que nos dejan trabajar con dignidad. Es un grupo de empresas que todas son españolas y cotizo en España con toda regularidad", ha añadido.
El secretario de Transportes de UGT Madrid ha diferenciado la concentración protestas de mañana, autorizada por Delegación de Gobierno, en la calle Princesa con el "cierre patronal" de los taxistas. "El taxi lo respeto y lo apoyo si no hay nadie que pueda fastidiar a nadie. Pero es un cierre patronal y no es lo mismo", ha apuntado.
"Una reivindicación para perjudicar a otros"
Los conductores han expuesto que sus empresas solicitaron legalmente una seria de licencias hace unos años y desde entonces ellos están trabajando legalmente, por lo que no entienden por qué ahora los taxistas "quieren cambiar las reglas de juego". En esta línea, Francisco Antón no comprende por qué unas reivindicaciones con la de los taxistas se basen en perjudicar a otro sector.
Respecto a las acusaciones de determinadas infracciones, ha pedido a los taxistas que si son constitutivos de delito lo pongan en conocimiento de las autoridades. "Contamos todos con el apoyo de nuestras empresas pero nos tenemos que movilizar nosotros porque está en peligro nuestro puesto de trabajo".
Otro de ellos ha asegurado que no hacen captación de clientes y si ven gente levantado la mano es porque el cliente antes ha precontratado el servicio y le está indicando al conductor que es él. "Con las aplicaciones nunca hay posibilidad de hacer captación directa ni a mano alzada. Nosotros tenemos que estar esperando a que llegue el pedido del servicio", ha dicho.
Sobre la normativa de 1 VTC por cada 30 taxis, Guillermo Cobos ha apuntado que se cumple y que se trata de una ley de concesión de licencias se quitó con la crisis y a partir de 2015 se volvió a poder pero que las licencias que se dieron "fueron legales" y ahora hasta que no se llegue a ese ratio no se darán licencias nuevas.
Casi todos los conductores de VTC presentes hoy han sufrido agresiones o acoso por parte de taxistas, especialmente en la última semana y trabajan "con temor". Así, Paloma Blanco ha relatado que tuvo que esquivar a varios taxis en la Castellana el otro día y que trabajo la mitad de la jornada el sábado porque se sentía "agobiada y asustada". "No sabes en qué momento te pueden hacer algo", ha agregado. Solo en la empresa Véctor han contabilizado 50 agresiones a coches la última semana.