José Ignacio Goirigolzarri quiere pisar el acelerador en Bankia. El objetivo, una vez digerida BMN, es recuperar el pulso comercial perdido durante el primer semestre del año con la integración en marcha. Una estrategia que, guiada por el plan estratégico a 2021, quiere, entre otras cosas, incrementar la presencia de la entidad en el mercado hipotecario. 

El objetivo es alcanzar un 10% de la cuota de concesión de hipotecas, lo que supone incrementar en algo más de 1,8 puntos el nivel actual. Durante el pasado curso la entidad formalizó 2.928 millones de euros en préstamos hipotecarios, lo que supone un 6% más. El reto estará en mantener el buen tono del ‘territorio’ Bankia (donde crecieron un 28%) y engrasar la maquinaria comercial de la antigua red de BMN para paliar el descenso del 31% registrado en 2018 frente a 2017. 

Para ello, desde Bankia se analiza un mercado que cada vez es más “dinámico”, con el objetivo de “adaptar” las condiciones. Es decir, que se “redefine” la política de precios siempre que es necesario.

Crédito promotor

El hipotecario será clave para la entidad, dado que todavía queda margen de recorrido en este campo. Empezando porque la evolución de los precios de la vivienda demuestra que todavía “no estamos en algo parecido a una burbuja”, ha dicho Goirigolzarri. 

Para explicar la situación en la que nos encontramos, el presidente de Bankia pone encima de la mesa algunos datos: el pico máximo de visados de viviendas que se concedieron en España fue de 885.000 frente al mínimo de 32.000 y de 96.000 del 2018. La compraventa de viviendas alcanzó en su apogeo un máximo de 775.000 operaciones, unos mínimos de 293.000, y hoy en día se sitúa en 513.000.

Esta evolución positiva también permitirá a Bankia apostar por el crédito promotor, terreno que le estaba vetado hasta el año pasado, cuando acabaron las restricciones impuestas por Bruselas tras el rescate. Sólo en 2018 concedieron unos 400 millones de euros y la intención es alcanzar los 1.000 millones durante el presente curso. 

“Todos tienen diferencias con el promotor de hace años, sobre todo en cuanto a las condiciones”, matiza Goirigolzarri para evitar suspicacias sobre las operaciones que se aprueban ahora con las que se permitían durante la época de la burbuja inmobiliaria.

Resultados 2019

Una hoja de ruta trazada durante la presentación de resultados de la entidad de 2018. Unos números que reflejan un beneficio de 703 millones de euros, lo que supone un 39% más que el año anterior. Ahora bien, ojo a la evolución del último trimestre, en el que perdió 40 millones de euros debido, en parte, a la provisión de 85 millones fruto de la venta de una cartera de activos improductivos a Lonestar. 

Bankia también mantendrá inalterable su hoja de ruta en cuanto a la retribución al accionista. El objetivo es la devolución de 2.500 millones de euros de capital. Lo que no ha despejado todavía es si habrá o no dividendo extraordinario. 

Goirigolzarri considera que todavía necesitan “claridad sobre los requerimientos del capital regulador sobre este año y el próximo” antes de tomar decisiones sobre este asunto.