En Adif saben que van a jugar un papel fundamental en la futura liberalización del transporte de pasajeros por ferrocarril. Del mismo modo, la compañía ve en la entrada de la competencia una gran oportunidad de negocio que les permita reducir drásticamente su deuda. Esto hace que la empresa presidida por Isabel Pardo de Vera esté trabajando para poner en marcha todas las medidas que aseguren el atractivo de España como mercado ferroviario tras la llegada de la nueva etapa liberalizada en diciembre de 2020.
La compañía ya dio un paso en firme muy rotundo hace unas semanas con la reducción de tasas por explotación de la línea. Tanto desde la CNMC como desde el sector siempre se ha señalado que las infraestructuras ferroviarias españolas están infrautilizadas en comparación a otros mercados.
La liberalización del sector debería marcar un antes y un después en esta situación y disparar el uso de las infraestructuras ferroviarias. Una circunstancia en la que el coste de explotación va a ser fundamental y en la que, en este momento, parece razonable contar con unas tasas bajas que fomenten que aumente el número de trayectos. Que los futuros operadores paguen poco pero que, motivados por estas buenas condiciones, paguen muchas veces.
Una vez aclarada la política de pagos, el siguiente paso tiene que ver con el tiempo. Adif quiere que los nuevos operadores lleguen a España para quedarse. Que el mercado español ocupe un lugar privilegiado en sus estrategias a largo plazo. Para ello, desde el administrador de infraestructuras ferroviarias se va a ofrecer contratos marco de cinco años a las operadoras.
Una medida que persigue dar estabilidad, sobre todo a los nuevos jugadores, para que puedan poner en marcha planes e inversiones a medio y largo plazo en España. El arranque de operaciones de los nuevos jugadores va a suponer importantes desembolsos económicos: compra o alquiler de trenes, instalaciones, plantilla, mantenimiento... Para que esas inversiones tengan un retorno los operadores ferroviarios van a tener que enfocar su estrategia con visión de futuro.
El ejemplo italiano
Italia fue el primer mercado europeo en poner en marcha, en 2012, una liberalización del mismo calado que la que arrancará en España en diciembre de 2020. Haber sido pioneros en este sentido ha permitido al país, y a sus operadores ferroviarios, llevar muchos cuerpos de ventaja al resto de socios comunitarios. Pero lo que se extrae de la experiencia italiana es, precisamente, que en este sector hace falta tiempo para hacer bien las cosas.
Tras un arranque complejo en el que operadores y reguladores fueron afinando en sus estrategias, los dos últimos ejercicios han reportado grandes alegrías económicas tanto a Italo, el operador privado italiano, como a Trenitalia, la Renfe del país.
La propia Pardo de Vera compartió durante unas jornadas organizadas por el IE Business School datos muy relevantes del mercado italiano: "El mercado de alta velocidad en ese país ha crecido un 80% desde su liberalización hasta 2016, pasando de 38 millones de viajeros a 68". Unas cifras que sirven de marco para la liberalización española.
Búsqueda de terrenos para los nuevos operadores
Otra forma de facilitar el desembarco de nuevos jugadores en el sector ferroviario español tiene que ver con sus instalaciones. Adif ha iniciado un proceso de búsqueda y localización de terrenos de su propiedad susceptibles de ser puestos a disposición de los nuevos operadores, para la construcción de sus instalaciones.
Adicionalmente, Adif está trabajando en un plan de adaptación al denominado 'Cuarto Paquete Ferroviario', la base normativa europea conforme a la que se está desarrollando el proceso de liberalización.
Este plan incluye todos los aspectos relacionados con el servicio que se presta a los clientes del ferrocarril. De esta manera, Adif está preparando las estaciones a la incorporación de nuevos operadores bajo cuatro criterios de gestión: trato no discriminatorio, transparencia, flexibilidad y sostenibilidad.
El objetivo es poner a disposición de los nuevos operadores la información relativa a los servicios ofertados, procedimientos de solicitud y adjudicación, así como precios. Todos los servicios se ofrecerán en un catálogo que será publicado en la Declaración sobre la Red.
En definitiva, una serie de medidas enfocadas a multiplicar el atractivo del mercado ferroviario español. El terreno de juego cada vez parece más preparado. Llega el momento de ver cuántos interesados hay y cuál es el nivel de su apuesta.