Durante los últimos años se ha culpado al alquiler turístico de parte de los problemas que más afectan a los habitantes de Madrid y Barcelona, entre los que se encuentran la subida del precio del alquiler de la vivienda. Sin embargo, este modelo de negocio cada vez tiene más defensores que detractores. Incluso hay profesionales del sector que han visto aquí una oportunidad que han abrazado, bien por cuenta propia o bien apoyándose en terceros, como Hostmaker. Marriott, por ejemplo, ha firmado una alianza con ellos para adentrarse en este segmento del mercado.
Se trata de una startup británica fundada y dirigida por Nakul Sharma y que cuenta con un total de 30 inversores, entre los que destacan Gaw Capital Partners, Sansiri, GuanQun Investment, Ventech e Intial Capital.
Este gestor integral de propiedades, como prefiere llamarlo Jaime de la Torre, director general en España, cuenta con un amplio catálogo de apartamentos turísticos en las dos ciudades más importantes de nuestro país. Esta empresa se encarga de toda la gestión de estos apartamentos, a los que les saca la máxima rentabilidad posible haciendo uso de la tecnología. Como explica de la Torre, “tú nos das la llave de tu piso y no te ocupas de nada más”. Sin embargo, las administraciones no se lo están poniendo fácil.
El panorama de los alquileres turísticos en España es complicado. Las hoteleras piden una regulación para este tipo de alojamientos y las administraciones les están poniendo cada vez más trabas. ¿Cuál cree que es el escenario futuro del sector?
El escenario es muy incierto porque las competencias están delegadas a las Comunidades Autónomas. El ministerio no tiene ningún interés en recuperarlas y, por lo que hemos visto, tampoco liderará este debate. Yo creo sería bueno que la administración central recuperase estas competencias porque unificaría el sector. Entonces, estamos muy a la expectativa del resultado de las elecciones autonómicas y municipales porque será lo que marque el ciclo de la regulación.
A nosotros la regulación no nos parece mal. Es más, yo la defiendo. Creo que el mercado de los apartamentos turísticos no tiene la culpa de la subida del precio del alqu ler en las ciudades. La subida del precio del alquiler en Madrid y Barcelona se debe a que son polos de atracción del talento, a que cada vez hay gente más cualificada con salarios más grandes y no se está construyendo vivienda nueva. Eso sube los precios. ¿Que la vivienda turística afecta? Sí, pero como parte de una serie de factores que se están dando. ¿Hay que regularla? Desde luego. Para un país como España, en el que el turismo representa el 11,8% del PIB, no ver la vivienda turística como una oportunidad me parece una ceguera.
¿Cómo ha sido su relación con la administración de Madrid durante los siete meses que llevan operando en la capital?
Hemos hecho los contactos pero no está progresando. Estamos a la expectativa de ver qué pasa en las elecciones para saber realmente por donde van a ir los tiros. Somos un actor que colabora con la administración, tenemos la capacidad de recaudar la tasa turística si la administración nos lo permitiera y si detectamos que viene un viajero de baja calidad no le aceptamos la reserva. Entonces, tenemos la capacidad de ayudar a elevar la calidad del turismo, que al final es lo que se merecen Madrid, Barcelona y todas las ciudades de España porque aquí tenemos mucho más potencial que el turismo de sol y playa. Estamos deseosos de sentarnos con la administración y proponerles trabajar juntos para que Barcelona y Madrid sean polos de turismo de calidad dentro de Europa.
¿Cuál sería para usted la solución más idónea a este problema?
La solución más idónea sería que las personas pudieran alquilar su vivienda habitual durante una serie de días. Yo viajo mucho y me gustaría poder alquilar mi casa dos o tres días a la semana para ayudar a pagar el alquiler. Al que tenga una segunda propiedad, se le puede dar una licencia, pero siempre controlando el número de licencias que se otorgan para que nadie acumule muchas.
Nosotros tenemos un departamento de atención al cliente operativo las 24 horas los 7 días de la semana. Entonces, si detectamos que hay mucho ruido vamos al apartamento. Tenemos una estrecha colaboración con los vecinos para que noten el impacto lo menos posible. Hacemos el check in en persona, les explicamos las normas del edificio, etc. Yo creo que cuando las viviendas son gestionadas de manera profesional ayuda a integrar al viajero con el resto de la comunidad.
Antes mencionaba que Hostmaker controla el tipo de viajero y lo aceptan o no en función del tipo de turista que sea. ¿Cómo lo controlan? Porque cualquier puede reservar con el DNI del acompañante.
Contamos con un sistema de verificación para saber que la persona que ha creado la cuenta es realmente quien dice ser. Luego, evidentemente, cualquiera puede coger la cuenta de alguien cercano para reservar. Al final, nosotros lo que tenemos es una serie de algoritmos que predicen el riesgo. Si alguien nos dice que quiere una casa para seis personas y vienen de Estados Unidos en Spring Break, la quieren en determinada zona, etc. se puede predecir qué tipo de turista es pero, por si acaso, le preguntamos el motivo del viaje, quienes vienen, los nombres de todas las personas que se alojarían en el apartamento, etc. El riesgo de que venga una despedida de soltero a Barcelona en el Mobile World Congress es muy bajo. Además, no admitimos viajeros de menos de 22 años y les avisamos de que vamos a identificarlos a su llegada.
Como si llegasen a un hotel
Claro. Nosotros somos hoteleros al fin y al cabo. Es muy difusa la barrera entre un apartamento turístico y una habitación de hotel.
Lo pregunto porque a mí, por ejemplo, en unos apartamentos turísticos me han pedido todos los datos y en otros no…
Ahí cada uno hace lo que quiere. Nosotros hacemos lo que marca la ley porque lo que queremos, entre otras cosas, es tener una colaboración muy proactiva con la autoridad.
Empezamos hablando de las hoteleras pero la conversación se ha desviado. ¿Qué piensa de esta guerra que tienen contra los apartamentos turísticos?
Yo no lo llamaría guerra, lo llamaría resistencia al cambio. Me parece normal que protejan su negocio pero se trata de una actitud un poco inmovilista. El cambio va a llegar, tú te puedes resistir y que te pille o puedes abrazarlo y sumarte a él, integrarlo a tu negocio para hacerlo más grande. Eso es lo que está haciendo Marriott con nosotros. Yo hace mucho que no voy a un hotel.
Y tiene más libertad
Sí. Si te vas de viaje una semana llega un momento en el que te cansas de desayunar, comer y cenar fuera y de dormir en una habitación de ocho metros cuadrados en la que tienes un baño, un armario, una mesita con la tele, la cama y ya está. La demanda no se va a adaptar y los hoteleros tendrán que entrar en el negocio de los alquileres turísticos para diversificar.
La revista Forbes incluyó a Hostmaker en el ranking de las cinco startups que más crecerán en el futuro. ¿Se está cumpliendo este pronóstico?
Deloitte nombró a Hostmaker como la tercera startup que más había crecido en los últimos cinco años. O sea, que de momento se está cumpliendo. Llevamos un crecimiento bastante grande y eso que crecer es este sector -y con una regulación incierta- es complicado. De todas formas, lo más importante para nosotros es seguir maximizando el revenue de las propiedades que gestionamos. Yo prefiero cerrar 2019 con 500 viviendas a las que estoy sacando todo lo que puedo que cerrar con 1.000 viviendas y no ser el mejor. El crecimiento sí, pero crecimiento inteligente. Si para crecer tenemos que bajar la calidad, pararemos.
Crecer si les deja el ‘brexit. Hostmaker es una empresa británica.
Pero en España, la empresa es española. Yo creo que el ‘brexit’ de por sí es malo para muchas cosas, pero no es particularmente malo para Hostmaker. Puede haber una transferencia de inversores inmobiliarios que en lugar de invertir en Reino Unido decidan invertir en otros países y España es uno de ellos porque la situación aquí es muy buena para todos los inversores inmobiliarios y, en este caso, el brexit podría beneficiar a Hostmaker. Pero yo creo que lo que es malo para Europa es malo para todos. Yo soy del 'remain'.
Ya para terminar, ¿cómo ha sido el 2018 para Hostmaker?
Ha sido un año en el que hemos lanzado Madrid. Nos ha costado y aun así hemos crecido. En Barcelona ha sido un año fantástico en el que hemos crecido al 250%. Además, hemos pasado de tener 125 viviendas a tener a 250.
¿Y qué perspectivas de crecimiento tienen para este año y para los venideros?
En Madrid estamos muy a la expectativa de la regulación porque no queremos ampliar nuestra oferta y luego encontrarnos con una legislación negativa. En cuanto a Barcelona, veo unas perspectivas de crecimiento brutales. El otro día salió la encuesta de Apartur y la ocupación en Barcelona estuvo en el 77% durante el 2018 mientras que nosotros hemos tenido una ocupación del 84%. Yo quiero acabar el año con 1.000 viviendas. Creo que es posible llegar a ese número pero tenemos que trabajar muchísimo.
¿Qué planes de expansión tiene a corto y largo plazo?
Ahora mismo estamos concentrados en Barcelona y esperando a ver qué ocurre en Madrid. España tiene una ventaja y es hay 40 sitios a los que ir porque en todos hay oferta y demanda durante todo el año. Tenemos que consolidar Barcelona y ser los más grandes allí antes de meternos en nuevas aventuras. Cuando seamos los mejores en Barcelona podremos abrir nuevos mercados. Todo está en nuestro radar pero no tenemos planes de avanzar en el corto plazo.