En un contexto de conflictos laborales en el centro de Amazon de San Fernando de Henares, un empleado de la compañía de distribución ha intentado jugar a 'El Dioni', hasta que le han pillado con las manos en la masa.
La Policía Nacional ha detenido en San Fernando de Henares (Madrid) a un empleado de Amazon y a otras dos personas por haber sustraído género de la empresa por un valor total de 300.000 euros.
El detenido, gracias al puesto de trabajo que ocupaba y su conocimiento sobre los mecanismos de la compañía, manipulaba los envíos que hacían sus cómplices y les enviaba móviles y relojes cuando ellos pedían productos baratos a través de una aplicación móvil. La mejor suscripción ‘Amazon Prime’ del mercado.
Tolerancia cero
Amazon ha señalado, en un comunicado recogido por Efe, que ha trabajado “estrechamente con la Policía” y que tiene “tolerancia cero hacia cualquier tipo de actividad general”.
La investigación se inició a finales de 2018, cuando el departamento de seguridad de la empresa detectó en la zona de distribución cinco paquetes cuyos pesos de salida del centro no coincidían con los de entrada.
Al inspeccionarlos, descubrieron que en su interior, en vez de encontrarse el objeto de poco valor que los clientes habían comprado a través de la aplicación móvil, había móviles y relojes electrónicos de alta gama.
Los agentes descubrieron que el empleado, que tenía acceso a los inventarios y a los productos, sustraía productos de alto valor de la zona de almacenaje -teléfonos móviles, relojes- de los que quedaran pocas unidades y que, una vez tenía preparado el género que quería robar, lo empaquetaba y calculaba su peso.
Instrucciones detalladas
A continuación, el detenido avisaba a sus cómplices para que hicieran un pedido y les indicaba tanto el producto a comprar, del cual ya había calculado el peso para que coincidiera con el del material que quería sacar de la empresa, como el día y la hora en que debían hacerlo.
Si la orden de compra salía de alguno de otros centros logísticos de la multinacional que no fuera el de San Fernando de Henares, el operario se lo comunicaba a su cómplice para que diera orden de devolución.
La investigación, que llevó a cabo el grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Coslada-San Fernando de Henares, se saldó con tres detenidos y otras personas investigadas con distinto grado de implicación.