El presidente de ACS, Florentino Pérez, ha anunciado que el grupo aprobará una "notable subida" de su dividendo, en concordancia con los resultados de 2018 y "las buenas perspectivas para 2019" por la evolución de sus negocios y la aportación de Abertis.
"La reunión del consejo de administración del próximo mes de marzo será la que decida el dividendo, pero va a subir, será una subida notable", avanzó el presidente del grupo durante la presentación de los resultados de 2018.
Florentino Pérez detalló que con esta subida, el porcentaje de beneficios que se destinará a retribuir al accionista superará la cota del 50%.
El presidente y primer accionista de ACS confirma de esta forma lo que ya avanzó en la junta del grupo de pasado año, cuando indicó que el aumento de las ganancias y la aportación de Abertis se trasladaría a sus accionistas mediante un incremento del dividendo "de, como mínimo, la misma proporción".
"La operación de Abertis, junto a las excelentes perspectivas de crecimiento, repercutirán en un incremento sustancial en el beneficio neto y en los fondos distribuibles en los próximos años", aseguró entonces el presidente de ACS.
Así, el consejo de marzo del grupo decidirá sobre el importe del dividendo que tradicionalmente reparte en el mes de julio, complementario al ya abonado en febrero.
Este primer pago de febrero fue de 0,450 euros por acción, similar al abonado el pasado año, si bien la compañía ya elevará el reparto complementario de julio desde el importe de 0,936 euros pagado el pasado año.
1.000 MILLONES DE BENEFICIO EN 2019
El 2019 será el primer año en que Abertis contribuya a las cuentas de todo el ejercicio completo de ACS, lo que le permitirá que su beneficio supere la cota de los 1.000 millones de euros, según avanzó también el presidente.
En 2018 la inversión en el grupo de autopistas ha aportado 175 millones sólo por medio año, desde que en junio concluyó la opa conjunta con Atlantia. Esta aportación proviene de la participación del 30% que ACS tiene directa, y la del 20% que ostenta de forma indirecta a través de Hochtief.
METRO DE LIMA
El Estado peruano reclama más de 700 millones de dólares (más de 614 millones de euros) a la sociedad concesionaria de la Línea 2 del metro de Lima, en la que participan las constructoras españolas ACS y FCC, por los retrasos en la puesta en operación del proyecto.
Las autoridades peruanas han presentado una contrademanda ante el Centro Internacional para el Arreglo de Diferencias sobre Inversiones (Ciadi), dependiente del Banco Mundial, en respuesta a la demanda previa del consorcio contra Perú, según explica ACS en la información sobre resultados remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).