Vittorio Colao llama a los gobiernos europeos a tomarse en serio la seguridad de sus redes e infraestructuras de comunicaciones. Para el ex consejero delegado de Vodafone los 27 deberían plantearse de qué forma quieren proteger a sus sociedades de posibles ataques o espionajes de otras potencias exteriores, sobre todo de China.
Ese es el riesgo que se asume cuando se adopta "tecnología y software procedente de países con estándares democráticos distintos de los nuestros". A su juicio, existe un riesgo de que esas potencias ejerzan "poder" o influencia sobre los fabricantes que nos proveen empleando esa ventaja como "arma geopolítica". Un riesgo que hay que "valorar seriamente" y que ha llevado ya a que algunas 'telecos' europeas hayan limitado la adopción de tecnologías chinas en "partes vitales de sus infraestructuras", insiste Colao.
La postura europea contrasta con la posición estadounidense que lleva esa protección a todos los ámbitos: desde las redes a los teléfonos inteligentes o las tabletas. Lo hace "por elección geopolítica y por protección de intereses comerciales", ya que muchos de los fabricantes de todos esos aparatos son americanos.
El ex-consejero delegado de Vodafone hace estas reflexiones en una columna publicada en el diario Expansión. En ella se pregunta si Europa está dispuesta a adoptar una medida similar a la que ha tomado Estados Unidos. "¿Podemos desarrollarnos digitalmente de forma segura si toda la tecnología viene de fuera de Europa?", concluye.
Crear un cuerpo de seguridad
Teniendo en cuenta que tenemos una sociedad cada vez más tecnologizada, y en donde el Internet de las cosas gana peso, sería importante que los gobiernos opten por decidir. Y es que Colao cree que por mucho que se controle a China y a aquellos que compran sus componentes, cada vez será más complicado protegerse. Lo mismo ocurre con Estados Unidos que, pese a compartir valores democráticos, "favorece legítimamente sus intereses estratégicos".
La solución está en el "mantenimiento y desarrollo del sector tecnológico europeo". Una tarea que llevará años pero que podrá hacerse si los países europeos se apoyan "en tecnologías no europeas pendientes de certificar técnica y científicamente".
Para mitigar los riesgos Colao aboga por la creación de un "cuerpo de seguridad digital" que tengan poder para "inspeccionar, verificar, investigar y, si es preciso, contraatacar o reprimir" dentro del mundo digital. Se trataría de una unidad que estaría "definida por ley al servicio de los cuerpos tradicionales y a las directrices de los gobiernos", concluye. También reclama la creación de un cuerpo 'gemelo' que trabaje al servicio de de empresas e instituciones nacionales.
Una reflexión que el ex consejero delegado de Vodafone hace tras el Mobile World Congress en el que la pregunta sobre si el fabricante chino Huawei es un 'aliado' o un 'sospechoso' de la industria tecnológica estaba en el aire. Desde Estados Unidos consideran que la tecnología Huawei y su software 'trabaja' para el gobierno chino facilitando el espionaje. Una opinión que Colao no comparte y que, basándose en análisis de la seguridad inglesa, considera "vulnerabilidades que debe solucionar".