Es la comidilla del sector. Si hay una operadora que esté en boca de todos, ésta es Digi, la teleco virtual que ha revolucionado las portabilidades en el comienzo de año. En el segmento móvil es la que más ha ganado después de MásMóvil y se está haciendo fuerte en el bajo coste, la batalla que todas las compañías quieren librar en el comienzo de este año 2019.

Y sus números le avalan. La compañía llegó a 1.343.000 líneas en España, según consta en los resultados anuales reportados por su matriz en Rumanía. Esta cifra, ya de por sí sorprendente, significa un crecimiento del 447.000 altas en un año y de 130.000 en los últimos tres meses. MásMóvil aumentó 2,25 millones sus líneas en este mismo periodo, con la operadora étnica en el segundo lugar de crecimiento.

Una mejora que se ha mantenido en 2019. Los datos de portabilidad que se han conocido en enero y febrero indican que en los últimos dos meses, Digi ha sumado otras 43.000 líneas, lo que elevaría su cifras hasta rozar los 1,4 millones de oyentes. 

Dependencia de las líneas móviles

Para hacernos una idea de estas magnitudes, Euskaltel, una operadora que aspira a ser la quinta teleco de España con su próxima expansión nacional, cerró el año con 957.000 líneas móviles, un 40% menos que Digi. Paradójicamente, la operadora vasca -que además tiene televisión y productos convergentes- ha generado una gran exposición mediática por la guerra entre sus accionistas, a diferencia de Digi, que con muchos menos recursos, y en silencio, ha conseguido 400.000 líneas más que Euskaltel.

Precisamente, si habría que nombrar una debilidad de Digi en su crecimiento, ésta sería su excesiva dependencia de las líneas móviles. Para comenzar a enriquecer su oferta, desde hace unos meses se han centrado en vender productos con fibra, fruto de sus acuerdos mayoristas con Telefónica, pero al cierre de 2018 no han logrado un gran despliegue. Según se desprende de las cifras de su matriz, la compañía tiene 8.000 líneas de internet y otras 3.000 de teléfono fijo en España. Si bien es cierto que, por ahora, sólo opera en Madrid.

Mucho camino por recorrer. Pero para ello desplegará fibra óptica propia en barrios seleccionados de Madrid durante este año 2019. Con ello, pondrá en marcha su primera expansión de red en una década y una de las primeras de un operador móvil virtual en España. Digi ya ha encargado a un proveedor tecnológico de primer nivel que elabore el proyecto de despliegue de red para ponerlo en marcha en los próximos meses. 

Despliegue en barrios de Madrid

El objetivo es llegar con red propia a determinados barrios de Madrid donde hay mayor número de población inmigrante -y de ciudadanos de origen rumano- uno de sus públicos objetivos más fieles. Es decir, distritos como Fuencarral-El Pardo, Latina, Carabanchel, Villaverde, Puente y Villa de Vallecas, Vicálvaro, Moratalaz, Ciudad Lineal, San Blas y Barajas.

Con ello, comienzan un despliegue que a medio plazo debería ser más rentable y que implica mantener la red de Telefónica para ir creciendo en otras ciudades fuera de Madrid. Una estrategia de expansión paulatina y con la que se apuesta por generar valor a los servicios que entregan a sus clientes. 

Durante los primeros nueve meses del año, la compañía facturó en España 90,6 millones de euros, lo que supuso un crecimiento del 33% en un año. La estimación del operador es superar los 100 millones al cerrar el año. Datos que consolidan a España como el segundo mercado del operador tras Rumanía y Hungría y que ya representa más del 12% de la facturación total de su matriz.