Dia se dispara un 6% en bolsa con su pacto de última hora con acreedores
- La banca obliga a Dia a crear una filial con sus tiendas más rentables
- El acuerdo sólo tendrá efecto si las propuestas del consejo salen adelante
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La junta de accionistas de Dia se caldea a solo un día de su celebración. El consejo de administración de la cadena de supermercados ha anunciado mediante un hecho relevante en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) un acuerdo de último minuto con sus acreedores apenas unas horas antes de la cita clave. Un cónclave en el que la hoja de ruta de la directiva debe hacerse con el respaldo de la mayoría para que el pacto de refinanciación tenga efecto.
La respuesta al pacto en la bolsa no se ha hecho esperar y las acciones del grupo han subido un 6,4% hasta los 0,62 euros por acción, una cota aún sensiblemente por debajo de los 0,67 euros que el empresario ruso Mijail Fridman ha ofrecido en su oferta pública de adquisición (opa) por la cotizada. Una puja que, para que llegue a aplicarse, ha puesto la condición de que la junta de mañana miércoles apruebe su plan financiero para el grupo, que no contempla una refinanciación cerrada como la que han conseguido presentar in extremis desde el consejo de administración.
A la espera de ver qué ocurre en la junta, los acreedores de Dia se han sumado a una “carta de compromiso” para la modificación de sus actuales líneas de financiación sindicada, cuyo importe conjunto asciende en la actualidad a 912,12 millones de euros. Entre las condiciones pactadas está la extensión del vencimiento ordinario de todos los tramos hasta el final de marzo de 2023, la obligatoriedad de amortizar deuda mediante la venta de activos no estratégicos (Max Descuento y Clarel) antes del 21 de abril de 2021 por al menos 100 millones de euros y la refinanciación de los bonos existentes con vencimiento en 2021 hasta al menos enero de 2023.
Para que estos términos tengan efecto, Dia deberá alcanzar un Ebitda igual o superior a 174 millones de euros en el acumulado de 12 meses previos a las fechas de revisión del 31 de diciembre de 2019 y el 30 de junio de 2020. En este mismo sentido, los acreedores obligan a la cadena española de supermercados a “transferir un número de establecimientos comerciales que representen al menos el 60% del Ebitda restringido a una filial operativa participada indirectamente al 100%” por la matriz del grupo.
En virtud de lo que mañana pueda ocurrir, si la directiva de Dia se lleva el gato al agua, se ha establecido la convocatoria de una junta extraordinaria en la que aprobar los términos de este acuerdo para el 15 de agosto de 2019 a más tardar, para que al cierre de este año 2019 pueda “haber finalizado debidamente dicha operación”.
Con este principio de pacto, los consejeros de Dia logran llegar reforzados a una junta a cuyos invitados han alertado en repetidas ocasiones de que, si salen adelante las propuestas de LetterOne, la compañía correría peligro real de “disolución o concurso de acreedores”. A principios de mes, a lo largo de una presentación de 31 páginas, confrontaban sus propuestas con las del empresario ruso para llegar a la conclusión de que la hoja de ruta de su anterior socio y ahora opositor “no proporciona soluciones eficaces e inmediatamente ejecutables a los desafíos a los que se enfrenta la compañía en el corto plazo”.
En este sentido, los miembros del consejo de Dia -órgano en el que LetterOne rechazó tener presencia pese a ser su primer accionista- apuntaban directamente hacia los vencimientos de deuda más inmediatos que tiene que afrontar el grupo de supermercados. En primer lugar, los previstos para el 31 de mayo de este mismo año, cuya ausencia de refinanciación activaría “los supuestos de vencimiento anticipado” de otros títulos.
ADVERTENCIAS CONTRA FRIDMAN
Un problema que, según los consejeros, se extendería también al vencimiento de los bonos de julio de 2019 (306 millones de euros) en el caso de que la opa de acciones que ha lanzado a 0,67 euros por acción no se liquidase satisfactoriamente antes de esta fecha. Una posibilidad que además señalaban más que factible debido a la misma duración del proceso, así como a la probable aparición de “retrasos en la autorización de las autoridades de competencia o la aparición de ofertas competidoras”.
En su lugar, los consejeros de Dia se presentaban como garantes de la “modificación y extensión de toda la deuda bancaria antes del vencimiento del 31 de mayo de 2019”, con lo que se asegurarían llegar a tiempo antes de cualquiera de los vencimientos previstos para los próximos meses. Además, proponen un plan de actuación sin condicionantes, frente a la exigencia de Fridman de que su opa salga adelante, sin la cual “tampoco ofrece una solución alternativa” para sanear la estructura de capital del grupo.