El Grupo PSA invertirá 250 millones de euros hasta 2021 en la planta de Opel en Figueruelas (Zaragoza) para la producción del nuevo Corsa y su versión eléctrica, según consta en un Decreto Ley publicado en el Boletín Oficial de Aragón (BOA).
Por su parte, el Gobierno de Aragón ha acordado conceder una subvención de cuatro millones de euros a Opel España para impulsar la producción del nuevo vehículo eléctrico en la factoría zaragozana.
De esta forma, el Gobierno regional concede un crédito extraordinario a Opel con cargo a los Presupuestos autonómicos prorrogados de 2018, para impulsar proyectos de investigación y desarrollo, eficiencia energética y medioambiental.
Este crédito se financiará con bajas en tres aplicaciones presupuestarias de 500.000, dos millones y 1,5 millones de euros, "sin afectar a los compromisos establecidos en materia de estabilidad presupuestaria".
Asimismo, el texto recuerda que en la planta de Figueruelas trabajan actualmente 5.400 personas de forma directa y se generan otros empleos indirectos en el resto de la industria auxiliar de la automoción, 213 firmas en Aragón que emplean a unos 24.000 trabajadores en puestos "de gran calidad y cualificación".
"Se trata pues del único fabricante de automóviles de Aragón, de un sector que representa el 17% del valor añadido bruto (VAB) industrial autonómico y el 4,35% del VAB de la región", continúa el Decreto Ley, añadiendo que "esta empresa contribuye a las exportaciones del sector, que suponen más de un tercio del total de las exportaciones de la Comunidad, siendo por tanto un sector clave para Aragón por su elevado peso específico para su economía".
Cambios sustanciales
Así, "Opel España está inmersa en un proyecto de transformación de la planta en Zaragoza, con cambios muy sustanciales ya iniciados en el año 2018, con el fin de modernizar y mejorar la competitividad de la factoría, cambios que tendrán un efecto tractor sobre otras empresas, pymes, Centros Tecnológicos y Universidades de la región, por su potencial implicación en el mismo".
En este proyecto de transformación "se incluyen inversiones dirigidas a la fabricación de un nuevo vehículo y su versión eléctrica, así como otros gastos derivados de I+D, proyectos para el desarrollo de nuevos procesos innovadores de fabricación automatizada incluyendo fuertes novedades tecnológicas, inversiones en Industria 4.0, inversiones para el aseguramiento de la calidad, procesos innovadores relativos a la secuenciación y cadena de suministro".
También se abordan cambios para "la mejora de la prevención de riesgos laborales, la fabricación de vehículos eléctricos y nuevos modelos de plataforma PSA, la integración de nuevos materiales en el vehículo como la estampación en aluminio, o la diversidad de colores en el coche, la mejora de materiales y procesos de insonorizantes, así como el incremento de capacidad, inversiones de eficiencia energética y una gran mejora medioambiental".
El Gobierno regional ha observado que "la pugna entre las compañías productoras de vehículos, exige acometer ya las inversiones por parte de Opel España, so pena de quedar retrasada con respecto al resto de competidores en la fabricación de coches eléctricos, una de las mayores oportunidades comerciales de las próximas dos décadas".
Por otra parte, el Decreto Ley menciona la Estrategia de Promoción Económica e Industrial de Aragón 2017-2019, aprobada en el marco de la Declaración para el Diálogo Social entre el Gobierno de Aragón y los agentes sociales, que propugna un nuevo modelo económico "más sostenible tanto en la producción como en el consumo".
A esto se añade la aprobación, el 12 de febrero pasado, de la Estrategia Aragonesa de Cambio Climático, que "marca las líneas de actuación con el fin de mitigar la emisión de gases de efecto invernadero" en la Comunidad Autónoma.
El mismo día, el Ejecutivo ha acordado conceder otra subvención de 2.735.000 euros a la industria auxiliar para acciones de "apoyo a la investigación y el desarrollo del vehículo eléctrico", también con cargo a los Presupuestos prorrogados de 2018.
Revolución tecnológica
En la normativa aprobada, el Ejecutivo señala que "la movilidad está en plena revolución" porque "los coches que llevan años en el mercado deben sustituirse por otros propulsados mediante energías alternativas y por motor eléctrico", de forma que "la práctica totalidad de los fabricantes tienen claro que su futuro será electrificado".
La industria automovilística va a experimentar "una transformación total", pero "este reto no se puede abordar en solitario", sino que "se requiere un trabajo conjunto y en común para el mantenimiento de la relevancia que, en términos económicos y de empleo, tiene la fabricación de vehículos en Aragón".
Entre los cambios a introducir en la producción de vehículos, el Decreto Ley alude a los cuadros de instrumentos, los motores eléctricos y las baterías, "aspecto en el que se está bastante estancado", así como la necesidad de crear infraestructuras para este nuevo tipo de vehículos, de manera que "son muchos cambios radicales que deben tener lugar en muy poco tiempo" y es "imprescindible" que la Administración regional ponga en marcha sus propias iniciativas de estímulo.