La junta general de accionistas de Iberdrola, que se celebra este viernes 29 de marzo en Bilbao, reelegirá a Ignacio Sánchez Galán como consejero ejecutivo, con lo que el directivo, que el próximo mes de septiembre cumplirá 69 años, estará al frente de la compañía energética hasta 2023.

 

 El año pasado, el presidente de Iberdrola ya mostró a los grandes inversores institucionales su compromiso para renovar en el cargo por un nuevo mandato, lo que le permite pilotar así al completo el plan estratégico 2018-2022 del grupo.

 

 El último nombramiento de Galán como consejero ejecutivo de Iberdrola tuvo lugar en marzo de 2015, por lo que su renovación por un nuevo mandato de cuatro años debía producirse este año.

 

 Nombrado en 2001 vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de Iberdrola, Galán ocupa desde 2006 el cargo de presidente y consejero delegado del grupo.

 

 Desde su llegada a Iberdrola, el directivo salmantino ha impulsado la compañía hacia las renovables, redes y tecnología hidroeléctrica de bombeo, con unas inversiones de 100.000 millones de euros en las últimas dos décadas que ha llevado al grupo, en el marco de su proceso de expansión internacional, a triplicar su potencia operativa, pasando a tener a finales de 2018 más de 47.400 megavatios (MW).

 

 Además, la empresa ha clausurado en todo el mundo centrales térmicas que suman casi 7.500 MW de capacidad instalada, y cuenta con más de 1,1 millones de kilómetros de líneas de distribución -cinco veces más que en 2001-.

 

HA MULTIPLICADO CASI POR CUATRO EL VALOR EN BOLSA DE LA COMPAÑÍA.

 

 Asimismo, el directivo salmantino ha impulsado durante su mandato a la energética en Bolsa, multiplicando casi por cuatro su valor, hasta rondar en la actualidad los 50.000 millones de euros y convertirla, por capitalización bursátil, en una de las primeras 'utilities' del mundo.

 

 En beneficio, Iberdrola también ha pulverizado sus records. Así, en 2018 superó por primera vez el listón de los 3.000 millones de euros de beneficio neto -3.014 millones de euros-, más del triple de lo que ganaba en 2001 (906 millones de euros).

 

PRIMERA COMPAÑÍA DEL IBEX 35 POR PORCENTAJE DE MUJERES EN SU CONSEJO.

 

 Por otra parte, el órgano rector de la compañía propondrá a los accionistas el nombramiento de Sara de la Rica, catedrática de Economía de la Universidad del País Vasco y actual directora de la Fundación ISEAK, como nueva consejera independiente.

 

 Con la incorporación de De la Rica a su consejo de administración, Iberdrola se convertirá en la compañía líder del Ibex 35 por porcentaje de mujeres en su órgano rector, con un 42,8% de consejeras sobre un total de 14 miembros.

 

 El grupo energético prácticamente duplicará la media de porcentaje de mujeres en los consejos de administración del selectivo español -un 22% según el estudio de PwC Women to Watch-, superando ampliamente la recomendación del Código de Buen Gobierno de la CNMV para 2020 (30%) y la de la Comisión Europea (40% para ese mismo año).

 

 Además, Iberdrola refuerza su presencia de independientes en su órgano rector con la recalificación de Xabier Sagredo de 'otro externo' a 'independiente', contando 10 de los 14 miembros (el 71,4%) con esta categoría.

 

SALIDA DEL CONSEJO DE ANGEL ACEBES.

 

 Esta renovación en el consejo de administración de Iberdrola se produce tras la salida del órgano rector de Ángel Acebes, que era consejero de la eléctrica desde 2012.

 

 El mandato del que fuera ministro de Interior con José María Aznar como consejero de la energética expiraba este año. Acebes está imputado por la salida a Bolsa de Bankia.

 

 En la junta, también se someterá a ratificación y reelección el cargo como consejero de Xabier Sagredo Ormaza y las reelecciones de María Helena Antolín Raybaud, José W. Fernández, Denise Holt y Manuel Moreu Munaiz, todos ellos con la calificación de independientes.

 

CUENTAS Y DIVIDENDO.

 

 Además, deberán recibir el visto bueno de los accionistas las cuentas anuales, los informes de gestión, el estado de información no financiera y la gestión social y actuación del consejo correspondientes al ejercicio 2018. También se propone modificar los estatutos sociales con el fin de reflejar el propósito y los valores del grupo Iberdrola y formalizar su compromiso con los ODS de las Naciones Unidas.

 

 Otras de las propuestas a la junta serán la aplicación del resultado y distribución del dividendo correspondiente al ejercicio 2018, cuyo pago complementario se llevará a cabo en el marco del sistema de dividendo opcional 'Iberdrola Retribución Flexible', así como la aprobación de dos aumentos de capital relacionados con este programa.

 

INCREMENTO DEL 7,7% DEL DIVIDENDO.

 

 En lo que respecta a la retribución al accionista, el beneficio obtenido en 2018 permite al grupo cumplir su compromiso de incrementar el dividendo en línea con sus resultados. Así, el dividendo a cargo del pasado ejercicio se sitúa en 0,351 euros brutos por acción, un 7,7% más que el abonado en 2017.

 

 Este importe se obtiene de la suma del dividendo a cuenta de 2018 ya pagado el pasado 5 de febrero -0,151 euros brutos por acción- más 0,20 euros brutos por acción de dividendo complementario, que deberán aprobar los accionistas y se abonarán en el mes de julio.

 

 La energética también solicitará el respaldo de sus accionistas para llevar a cabo una reducción de capital mediante la amortización de un máximo de 280.457.000 acciones propias, representativas del 4,3% del capital social.

 

 De este modo, el número de títulos del grupo se mantiene estable en 6.240 millones y se evita el efecto dilutivo derivado de la implementación del sistema 'Iberdrola Retribución Flexible'.