“El Taxi es la luz de Madrid”. Apelando a la melancolía y al significado que tiene para los madrileños ver lucir el verde de las capillas del Taxi por las calles, la Comunidad busca ahora dar a conocer el nuevo reglamento del sector. Un conjunto de normas que buscan incrementar las posibilidades de los taxistas para competir con los vehículo de alquiler con conductor (VTC).
Dentro de las novedades está la puesta en marcha de un servicio de Taxi precio cerrado para los viajes contratados a través de una app o por teléfono. Esos viajes precontratados también podrán compartir los gastos entre distintos viajeros. Además se autoriza la puesta en marcha de vehículos de nueve plazas.
Para conseguir su objetivo habrá tres grandes mensajes: ‘Luz verde a subirse a un taxi sabiendo cuánto cuesta’; ‘Luz verde a ir los ocho en un mismo taxi’; y ‘Luz verde a compartir taxi… y gastos’. La Comunidad insiste en que se trata de “destacar la función del Taxi, un sector clave y estratégico de la región”.
El reglamento
La campaña ha sido muy bien recibida por los taxistas. Al menos, así lo ha explicado la consejera de transportes, Rosalía Gonzalo, quien ha recordado que “el sector del taxi es muy querido por este Gobierno y muy apoyado por todos los ciudadanos de Madrid”.
Con un presupuesto de 250.000 euros, el lavado de cara para los taxistas tendrá presencia en algunos vehículos, pero también en radio, internet y publicidad exterior. Se trata de una campaña que se centrará en los aspectos que afectan de manera directa a los usuarios, pero la norma es mucho más extensa.
Aunque la campaña estará centrada en esos aspectos, el reglamento contempla otras cuestiones. Entre ellas, la obligatoriedad de que todos los vehículos vayan ocupados con un datáfono, pero también la posibilidad de recoger a viajeros en municipios distintos de aquellos en los que estén domiciliadas las licencias -siempre que el destino sea el municipio que la ha concedido-; permitir a los ayuntamientos establecer planes de amortización para garantizar tanto la prestación del servicio a los usuarios como la rentabilidad de la actividad para los profesionales o simplificar los requisitos exigidos para obtener las licencias.
La huelga
Se trata de la primera campaña de publicidad que se hace para el Taxi de Madrid desde la huelga del pasado mes de enero. Protestaban contra los vehículos de alquiler con conductor (VTC) que utilizan Uber y Cabify. En sus acciones de protesta cortaron la Castellana, intentaron bloquear Ifema en pleno Fitur y realizaron cortes de tráfico en la M-40 y las calles de la ciudad.
La policía se vio obligada a desalojar a los taxistas de la Castellana, y la protesta -tras más de diez días de huelga- terminó sin éxito porque la Comunidad decidió no legislar en contra de Uber y Cabify como se hizo en Cataluña o Valencia.
Algunas asociaciones del Taxi de Madrid confiaban en que el Ayuntamiento lanzara un cambio del reglamento municipal que pusiera esos límites a las VTC. La realidad, en cambio, ha sido otra. El Consistorio de Carmena se ha quedado sin tiempo, y no va a aprobar nada en esta legislatura, algo que ha provocado algunas protestas. De hecho, está previsto que el próximo lunes 29 la alcaldesa Manuela Carmena tenga un encuentro con los representantes del sector.