La aerolínea española Iberia registró un crecimiento del 8 % en sus vuelos a Cuba en 2018 y quiere "seguir apostando" e incrementar su presencia en este destino, afirmó este viernes el presidente de la compañía, Luis Gallego.
El ejecutivo, que llegó ayer jueves a La Habana para celebrar las siete décadas de los vuelos de la aerolínea al país caribeño y el quinto centenario de la capital cubana, explicó que para este año se ha incrementado más de un 2 % la oferta de plazas para viajar a la isla.
"Vamos a seguir apostando por Cuba, ver si podemos incrementar la presencia de Iberia", dijo en un encuentro con empresarios y altos funcionarios cubanos Gallego, quien destacó la voluntad de la firma por "acompañar las inversiones, el desarrollo turístico" y potenciar la conectividad con Europa.
El presidente de la aerolínea recalcó que "si algo distingue a las empresas españolas es el compromiso duradero con América Latina" y agregó que la firma cree en las "inversiones a largo plazo".
La operativa
Iberia opera un vuelo diario entre Madrid y La Habana y ofrece más de 212.000 plazas anuales en esa ruta, que cubre con un Airbus A330/300 con 292 asientos en tres clases.
Según las estadísticas difundidas ese viernes, el 40 % de los pasajeros que transporta a este destino caribeño son españoles y el resto en su mayoría europeos, aunque se da la curiosidad de que la ruta entre Madrid y La Habana es la que cuenta con más pasajeros chinos de entre todas las capitales latinoamericanas a las que vuela la empresa.
La compañía ha conectado casi ininterrumpidamente España y Cuba desde hace 70 años, salvo un paréntesis de dos años entre 2013 y 2015, cuando se recuperó la ruta "con muchas expectativas", recordó el alto ejecutivo.
Gallego entregó este viernes al ministro cubano de Turismo, Manuel Marrero, una réplica del avión DC4 con el que la aerolínea cubrió su primer vuelo a La Habana el 21 de abril de 1949.
El ministro, que se reunió con Gallego y otros ejecutivos de la compañía, reconoció el aporte de la aerolínea española a la conectividad de la isla con Europa y agradeció los 70 años de "trabajo continuado" de Iberia en su país.
Cuba, una buena opción
En el acto estuvo también presente el embajador de España en Cuba, Juan Fernández Trigo, quien recordó que el segundo vuelo transatlántico regular que se estableció entre el país ibérico y América Latina fue el Madrid-La Habana.
Para el diplomático, estos vuelos "han sido siempre un instrumento de política exterior, y no digamos en Latinoamérica".
Fernández Trigo sostuvo además que "es una buena opción invertir en Cuba en el turismo", en un momento en que las empresas presentes en la isla se ven amenazadas por la activación del título III de la ley Helms-Burton, que permite demandar en cortes de Estados Unidos a empresas que se benefician de propiedades expropiadas tras el triunfo de la Revolución cubana (1959).
Tanto la Unión Europea como el Gobierno español han mostrado un firme rechazo a esta legislación estadounidense, cuya aplicación extraterritorial consideran ilegal y contraria al Derecho Internacional.