La competición por los aerotaxis no parece que vaya a ser cosa de dos. A diferencia del mundo de la aviación comercial, en el que Boeing y Airbus reinan sin apenas oposición, el nuevo campo de la movilidad urbana va a contar con más actores relevantes.
Lilium, startup con sede en Múnich, realizó la semana pasada el primer vuelo de su prototipo de aerotaxi de cinco plazas. El vehículo, de escala y peso completo, está impulsado por 36 motores a reacción totalmente eléctricos que le permiten despegar y aterrizar verticalmente, así como realizar vuelo horizontal o de crucero.
El diseño de la aeronave destaca por su simplicidad en comparación con otro modelos de su categoría. Frente a otros diseños que replican la forma y el funcionamiento de un dron, el modelo de Lilium no tiene cola, timón, hélices, ni caja de cambios.
Daniel Wiegand, cofundador y CEO de la empresa alemana se mostró exultante tras el evento: "Hemos dado otro gran paso para hacer realidad el futuro de la movilidad aérea urbana. En menos de dos años hemos podido diseñar, construir y hacer volar con éxito un avión con potencial para ser producido en masa".
Del mismo modo, Wiegand ha destacado la importancia de que el vehículo sea capaz de transportar a cinco pasajeros. "Contar con esta capacidad nos permite abrir el cielo a muchos más viajeros. Ya sean amigos o familias que vuelan juntos o viajeros de negocios compartiendo un viaje a la ciudad, tener cinco asientos ofrece una economía de escala que no se puede lograr con dos".
El Lilium Jet es capaz de alcanzar una velocidad máxima de 300 kilómetros por hora y tiene un alcance de 300 kilómetros. Estas características lo convierten en un vehículo capaz de completar viajes mucho más largos que la mayoría de los actuales conceptos de sus competidores.
Mientras que los aviones basados en aviones no tripulados consumen gran parte de su energía manteniendo el avión en el aire, el Lilium Jet requerirá menos del 10% de sus 2.000 caballos de fuerza durante vuelo de crucero.
Esta eficiencia, que es comparable al uso de energía de un automóvil eléctrico que recorre la misma distancia, permite a la aeronave no solo ser capaz de conectar barrios de las afueras con los centros urbanos, aeropuertos o estaciones de tren, también ofrecería conexiones de alta velocidad asequibles entre distintas ciudades de una misma región.
Listo para operar en 2025
El prototipo de avión, que durante el vuelo de prueba se controló de forma remota desde tierra, comienza ahora un profunda campaña de pruebas de vuelo en los que tendrá que demostrar su capacidad y sentará las bases para la certificación de la aeronave con estándares de seguridad comparables a los de loa aviones comerciales.
Lilium planea fabricar y operar el Lilium Jet como parte de un servicio de aerotaxi. Con solo presionar un botón en la app, los usuarios podrán señalar la plataforma de aterrizaje más cercana y planificar su viaje. Al elegir entre una red de plataformas a través de ciudades y regiones, desde la compañía señalan que los pasajeros disfrutarán de viajes con un coste similar al de un taxi, pero cuatro veces más rápido. Lilium espera estar operativo en varias ciudades del mundo para el año 2025.
"Soñamos con un mundo donde todos puedan volar a donde quieran, cuando quieran. Hemos invertido una gran cantidad de talento y cuidado en el diseño de una aeronave y un servicio que nos permita ofrecer esto, cumpliendo con las demandas de la sociedad para el transporte aéreo urbano: será silencioso, seguro y ambientalmente sostenible".
Al igual que los conceptos de Airbus, Boeing o Uber el vehículo de Lillium encara la pista de despegue y parece tener los motores listos para despegar rumbo a un futuro es el que, más pronto que tarde, los aerotaxis serán una de las piezas clave de la movilidad urbana.