Un paso más hacia una energía más 'verde'. Iberdrola ha inaugurado este jueves la central hidroeléctrica de Baixo Iguaçu (Capanema, Paraná), a través de su filial brasileña Neoenergía. Una central que cuenta con 350 megavatios (MW) de potencia y que ha supuesto una inversión de más de 500 millones de euros.

Según ha informado la eléctrica vasca, esta central será capaz de suministrar electricidad sostenible a un millón de brasileños; en concreto, su producción equivaldrá a cerca del 8% de la demanda anual de electricidad del estado de Paraná, donde se ubica la planta.

Durante el acto, Iberdrola anunció una inversión millonaria en el país. "Solo en los próximos cinco años vamos a invertir alrededor de 6.500 millones de euros en nuevos proyectos en Brasil para seguir mejorando su suministro eléctrico y, de este modo, su competitividad", ha asegurado el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, durante la inauguración. Aunque estaba prevista su presencia, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, no ha podido finalmente asistir al evento por las adversas condiciones meteorológicas, que han impedido aterrizar a su helicóptero.

Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, junto a algunos empleados de la central hidroeléctrica de Baixo Iguaçu, en Brasil. Iberdrola

En su discurso, Sánchez Galán ha destacado la implicación social y medioambiental del proyecto de Baixo Iguaçu: “Esta instalación supone un beneficio para las Cataratas del Iguaçu, ya que contribuirá al mantenimiento de un caudal mínimo necesario. Y a esto hay que sumar otras muchas iniciativas que han sido impulsadas en materia de salud, educación, infraestructuras y seguridad pública para preservar y fomentar el bienestar de la región".

En este sentido, Iberdrola explica que esta nueva infraestructura de energías renovables se ha construido manteniendo "los más altos estándares de calidad y respeto al medio ambiente" y se ha "minimizado al máximo" el impacto que puede tener la construcción de una central de este tipo.

En concreto, indican desde la eléctrica vasca, prácticamente no se ha modificado el cauce del agua, dado que de los 31 km2 del depósito de la central más de 20 km2 pertenecen al propio río, y gracias a la utilización de tres turbinas tipo Kaplan, el área de inundación necesaria es sensiblemente menor que la de otras hidroeléctricas de tamaño similar.

Neoenergía.

En el transcurso del acto, Sánchez Galán ha asegurado que “nos sentimos orgullosos de contribuir al desarrollo económico y social del país”, insistiendo en que el compromiso de Iberdrola seguirá aumentando. 

Regular los caudales de las Cataratas del Iguaçu

Asimismo, Iberdrola destaca que, entre otras de las aportaciones importantes de la central, está que podrá intervenir de forma determinante en la regulación de los caudales de las Cataratas del Iguaçu, una de las siete maravillas naturales del mundo, que visitan anualmente un millón y medio de personas. 

Las cataratas, cuyo caudal se ve seriamente afectado en los periodos de sequía, llegaron a transformarse en 2006 en pequeños chorros de agua, recuerda la eléctrica vasca. Ahora, un dictamen del Operador Nacional del Sistema Eléctrico (ONS) ha concluido que, gracias a la aportación de esta instalación hidroeléctrica, las famosas cataratas contarán siempre con el caudal mínimo necesario.  

Siguiendo en la línea de la contribuición ambiental, cabe destacar que a través del Consorcio Empresarial Baixo Iguaçu (CEBI) se han llevado a cabo varios programas ambientales que monitorean, rescatan y preservan especies autóctonas en el entorno de la central; además, se ha construido un corredor verde para los animales.

Por otro lado, y también con la colaboración del CEBI, se han firmado diversos convenios con los municipios del entorno para impulsar programas relacionados con la salud, la educación, las infraestructuras y la seguridad pública. Entre las iniciativas puestas en marcha figuran la ampliación de una escuela pública y la construcción de una nueva sede para la Policía Militar.

Neoenergía, inmersa en su salida a bolsa

Esta inauguración, en la que se ha hecho el anuncio de la inversión en Brasil, coincide en el tiempo con el proceso de salida a bolsa en el que está inmersa Neoenergía. A través de esta compañía, Iberdrola se ha convertido en una de las dos mayores eléctricas de Brasil por número de clientes, con 13,8 millones de puntos de suministro. Presente en 18 estados, se dedica a la generación, transporte, distribución y comercialización de electricidad en un área de 840.000 km2.

Neoenergía dispone hoy de una capacidad de producción en este país de más de 3.700 MW, de los cuales casi el 86% son renovables: tanto parques eólicos terrestres como centrales hidroeléctricas; una capacidad que alcanza los cerca de 5.000 MW si se suman los proyectos en construcción. Asimismo, cuenta con casi 700.000 kilómetros de líneas eléctricas, operadas por las cuatro empresas integradas en Neoenergia: Cosern, Celpe, Coelba y Elektro.