Iberdrola quiere instalar 25.000 puntos de recarga de coche eléctrico hasta 2021. Lo hará en hogares, empresas y zonas urbanas e interurbanas. Por eso, Iberdrola está dando la mano a distintos actores.
Uno de los objetivos de su plan, al que la eléctrica ha llamado Plan de Movilidad Sostenible, es instalar estaciones de recarga rápida (50 kW), súperrrápida (150 kW) y ultrarrápida (350 kW) -al menos cada 100 km- en las principales autovías y corredores del país durante 2019, llegando a todas capitales de provincia y permitiendo recorrer España de punta a punta con un vehículo eléctrico.
Pero, ¿cómo? La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán se encuentra inmersa en la firma de acuerdos con distintos entes que le permitan el desarrollo de la infraestructura urbana e interurbana; en concreto, la vasca centra su atención en estaciones de servicio, cadenas de restauración, hoteles, concesionarios o empresas.
Este mismo miércoles, Iberdrola anunciaba su alianza con los concesionarios Montalt, ofreciendo a sus clientes "soluciones ventajosas" para la compra e instalación de un punto de recarga, así como el suministro de energía verde, en el momento de la compra de un vehículo eléctrico en los casi 60 concesionarios del grupo en la Comunidad Valenciana.
Del mismo modo, donde están teniendo gran protagonismo sus alianzas es en el segmento de estaciones de servicio. La eléctrica ya anunció hace más de un año su unión con Avia para instalar los primeros 27 puntos de recarga, y hace unos días hizo público su acuerdo con Ballenoil, la red de gasolineras low cost, para incluir puntos de recarga rápida en sus estaciones; en concreto, 20 puntos durante este año.
No obstante, no son las únicas. Según ha podido saber este periódico, Iberdrola también está trabajando también con el grupo Valcarce para ampliar la red de puntos de recarga, identificando, en una primera fase del acuerdo, unas 30 ubicaciones en las que instalar los puntos de recarga.
El punto de recarga en el garaje
A lo anterior se suman sus acuerdos con empresas como Ikea, con la que firmó un acuerdo de colaboración por el que la energética instalará más de 50 puntos de recarga de vehículo eléctrico y suministrará energía 100% renovable en tiendas, centros logísticos y edificios corporativos este año.
También ha alcanzado acuerdos con otras como Telefónica, Red Eléctrica de España, Auchan o Zity; y con fabricantes como BMW, Renault, Hyundai, PSA o Volkswagen.
Una estrategia, la de dar la mano a diferentes empresas, que la eléctrica compagina con los planes para instalar puntos de recarga en garajes, tanto particulares como de comunidad. En concreto, su propuesta aprovecha el periodo más barato del día -entre la 1:00 y las 7:00 horas- para la recarga económica de la batería, con un coste estimado de 50 céntimos de euro por cada 100 kilómetros.
Habría que añadir, por otro lado, los planes concretos para empleados o para empresas -en el plano del uso corporativo-.
Una apuesta de la eléctrica vasca con vistas a la transición energética que sin duda será necesaria si, como prevé el Gobierno, en 2030 hay 5 millones de vehículos eléctricos circulando en España. "El plan es ambicioso, pero realizable", asumía Sánchez Galán durante la última junta de la compañía.