Los títulos de IAG, el 'holding' que engloba a Iberia, British Airways, Vueling y Aer Lingus, caen más de un 5% después de que este martes anunciara la firma de una carta de intención (LOI) con Boeing para la compra de 200 aviones del 737 MAX.
En concreto, las acciones de IAG han caído un 5,23% a las 11:33 horas de este miércoles y registra la mayor caída del Ibex 35, por delante de Viscofan (-1,3%) y Grifols (-1,1%). A esa hora, los títulos de la compañía se intercambiaban a 4,86 euros por acción.
El pedido está valorado en 21.452 millones de euros según el catálogo del constructor aeronáutico estadounidense, aunque IAG ha aclarado que ha negociado "un descuento sustancial" sobre el precio de lista con el fabricante.
El anuncio del acuerdo, realizado en el marco del Salón Aeronáutico de París, incluye aeronaves de los modelos 737-8 y 737-10, cuya cuantía por modelos no especifica, que serían entregadas entre 2023 y 2027 y estarían equipadas con motores CFM Leap, según ha detallado el grupo aéreo.
Boeing ha celebrado el respaldo de IAG a uno de sus aviones estrella ante la crisis que afronta después de que el 737 MAX protagonizara los graves accidentes en Etiopía e Indonesia en apenas cinco meses, lo que derivó en el veto al avión en todo el mundo, suspendido de vuelo desde mediados de marzo.
De hecho, el constructor estadounidense cerró la jornada bursátil en Nueva York con un repunte del 5,37% en su cotización.
IAG ha señalado que estos aviones serían operados por Vueling, LEVEL y British Airways en el aeropuerto de Gatwick, en Londres. El grupo aéreo formalizó además el acuerdo anunciado hace tres meses, para adquirir hasta 42 aeronaves del modelo 777X, el más grande de Boeing.
La matriz de Iberia volará una combinación del 737 MAX 8 (178 pasajeros en una configuración de dos clases) y el 737 MAX 10 más grande (hasta 230 pasajeros).
"Tenemos plena confianza en Boeing y esperamos que el avión 737 MAX retorne exitosamente a operar sus servicios en los próximos meses tras haber recibido la aprobación por parte de los reguladores", afirmó ayer el consejero delegado de IAG, Willie Walsh, tras anuciarse el acuerdo.
A la espera de que los reguladores establezcan fecha para la vuelta en servicio del modelo 737 MAX, Boeing, que ha reconocido haber cometido errores en la gestión de esta crisis, prevé que pueda volar este año.