La compañía de apuestas deportivas William Hill ha iniciado un proceso de consulta con sus socios comerciales para terminar de definir su plan de cerrar 700 locales de apuestas, según ha anunciado la firma en un comunicado.
La clausura de estos establecimientos pondrá en riesgo el empleo de 4.500 trabajadores. William Hill ha explicado que tratará de que las bajas se produzcan de forma voluntaria, así como que intentará recolocar a todos los empleados que pueda.
La decisión de la empresa se produce como consecuencia de que el Gobierno de Reino Unido decidiera reducir la cantidad máxima en juego en las máquinas de apuestas deportivas a dos libras, desde las 100 anteriores.
La limitación provocó que William Hill multiplicara por nueve sus pérdidas netas en 2018, hasta situarse en 712,3 millones de libras (793,6 millones de euros), por el deterioro de los activos pertenecientes a la división 'Retail', que agrupa todos sus locales.