Sánchez se centra en el SMI y el Estatuto de los Trabajadores pero elude hablar de fiscalidad
Insiste en derogar los aspectos más lesivos de la reforma laboral pero dentro del diálogo social y no aclara a las empresas cuál será su estrategia en materia tributaria.
22 julio, 2019 14:07Noticias relacionadas
Los empresarios han seguido con atención el discurso de investidura del candidato a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez. A falta de que se consume su posible pacto con Podemos, a las empresas les preocupa conocer el marco fiscal y de relaciones laborales en el que tendrán que desarrollar su negocio en un momento de cambio de ciclo económico.
En su intervención de este lunes, el todavía presidente en funciones ha aportado pocas novedades. De hecho, la fiscalidad ha sido la gran ausente del discurso, mientras que la derogación de la reforma laboral y el aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) han vuelto a un primer plano. También la vivienda y las infraestructuras -con el AVE a Cantabria- han sido señaladas por el candidato del PSOE como prioridades para esta legislatura.
En el Congreso de los Diputados, Sánchez ha llamado al resto de partidos a apoyar su investidura para lograr una “economía competitiva” que permita a nuestro país “liderar la revolución digital protegiendo a la ciudadanía del poder de estos nuevos monopolios”. Es decir, dejando claro "a quién pertenecen los datos" que consiguen plataformas como Google y Facebook, pero también obligando a esas empresas a pagar por el negocio que hacen en España.
Sin embargo, el candidato a la presidencia del Gobierno ha instado a que sea Europa quien lidere las medidas necesarias para ello. Es decir, que Sánchez se olvida de que sea España el país que abandere la imposición de la llamada ‘tasa Google’. Quizás esa sea una de las mayores novedades del discurso económico de investidura.
Pese a todo, el líder socialista sí ha arremetido contra los entramados fiscales empresas como Facebook, Amazon o Netflix. “Hay que proteger a la ciudadanía de estos monopolios”, para evitar que siga habiendo “injusticia social y el avance de nuevas formas de trabajo precario”, ha afirmado.
“Se trata de una cuestión de justifica fiscal”, ha dicho, y ha puesto el ejemplo de una compañía como Netflix, que el año pasado pagó sólo 3.146 euros en Impuesto de Sociedades.
Derogar la reforma laboral
En materia laboral, el candidato a ser investido presidente del Gobierno ha insistido en las ideas que han marcado su poco más de un año en La Moncloa, si bien ha hecho alusión en varias ocasiones en su discurso al diálogo social, que en los últimos meses se ha visto amenazado.
De hecho, antes de las elecciones, los empresarios llegaron a temer que el Gobierno llegara a pactar una derogación de algunos puntos de la reforma laboral de 2012 con un acuerdo con los sindicatos que dejase al margen al resto de agentes sociales. Este lunes ha quedado claro que Sánchez quiere hacer partícipes a los empresarios de esa vuelta atrás en la reforma laboral y el aumento del salario mínimo.
De hecho, el presidente aún en funciones ha avanzado que promoverá un Pacto de Rentas para mejorar los niveles salariales y colocar el SMI en línea con lo que se establece en la Carta social europea.
El decálogo en materia laboral que ha propuesto Sánchez contempla también la aprobación de un nuevo Estatuto de los Trabajadores que adapte el que fue aprobado “en el 80 del siglo pasado”, según sus palabras, al mercado laboral actual, en el que la robotización ha desfigurado el modelo de empresario, trabajador y autónomo.
Junto a ese Estatuto, si prospera su Gobierno, Sánchez aprobará el prometido Estatuto del Becario para “proteger a quienes dan sus primeros pasos impulsando su remuneración y limitando los tiempos de prácticas”.
Igualdad y conciliación
Además, promoverá una Ley de Igualdad, avanzará en su Plan estratégico para el retorno del talento que se marchó de España en los años de crisis, con especial foco en los investigadores, y pondrá en marcha el Plan Director por el Trabajo Digno. También pretende reordenar los subsidios de desempleo para “incrementar la cobertura” a quienes lo necesiten.
Una de las medidas más populares del decálogo es sin duda la de la racionalización de los horarios que ya introdujo en la agenda el Gobierno de Mariano Rajoy y que ahora se pretende impulsar con el fin de facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar.
Por último, para los autónomos, el todavía presidente en funciones se ha comprometido “esta legislatura sí”, a que los autónomos coticen por sus ingresos reales y a universalizar sus derechos.
Función social de la vivienda
En materia de vivienda Sánchez no ha querido extenderse, aunque sí ha dejado claro que su intención es seguir adoptando medidas para limitar las subidas de los alquileres. Para conseguirlo se ha comprometido a aprobar, por fin, una Ley Estatal de Vivienda y a “revisar” el Plan Estatal de Vivienda. Es decir, que abre la puerta a una de las grandes peticiones de Podemos, como es la de “limitar” los precios a los que se pueden alquilar las casas en las zonas donde los precios sean más elevados.
También el candidato se ha comprometido a impulsar las inversiones en materia ferroviaria, con especial hincapié a la Alta Velocidad con las conexiones a Cantabria y Extremadura, así como impulsar el corredor Mediterráneo y del Atlántico.