Naturgy no va a quedarse de brazos cruzados. La eléctrica que preside Francisco Reynés tiene varias armas preparadas para hacer frente a los recortes en las retribuciones a las energéticas propuestos por la CNMC, que afectan de forma muy directa a la gasistas.
En este sentido, la compañía, inmersa ahora en la preparación de alegaciones para enviarlas al regulador antes del 9 de agosto, guarda otras cartas bajo la manga. En concreto, y según ha explicado el presidente de la compañía este miércoles en la conferencia con analistas, Naturgy está analizando además todas las alternativas judiciales.
A juicio de la gasista, la propuesta de la CNMC realiza un "diagnóstico erróneo" del sistema de gas español y da como resultado una retribución insuficiente. Esto, ha explicado Reynés, provoca que las eficiencias se compartan de manera asimétrica y que "se obligue" a las compañías de distribución de gas a realizar inversiones que no son rentables, lo que a podría desincentivar el crecimiento.
En sus alegaciones, Naturgy se centrará en "proteger" el interés de todos los 'stakeholders'. En concreto, ha explicado el presidente, se centrará en proteger sus activos, pedir una valoración justa de los mismos y unos retornos ajustados al riesgo, con un modelo "razonable y estable" para sostener el crecimiento.
Beneficio de 592 millones
La gasista, ahora inmersa en la batalla contra el borrador que ha presentado la CNMC, ha hecho públicos este miércoles sus resultados semestrales. Entre enero y junio, la compañía se ha anotado un beneficio de 592 millones de euros, frente a las pérdidas de 3.281 millones del mismo periodo del año anterior.
En la presentación, Reynés ha resaltado que la eléctrica ha completado el primer año de operación desde que lanzó su nuevo Plan Estratégico 2018-2022. Durante los seis meses del ejercicio, las inversiones ascendieron a 700 millones de euros.