Acerinox ganó 69 millones de euros entre enero y junio, el 50% menos que en el primer semestre de 2018, mientras que su resultado bruto de explotación (ebitda) se contrajo el 30%, hasta 186 millones, debido, principalmente, a los bajos precios en Europa y Asia.
La producción rozó los 1,2 millones de toneladas, el 8% menos, y la facturación se redujo el 6%, hasta los 2.442 millones de euros, ha informado este viernes la compañía, que durante el segundo trimestre llevó a cabo un ajuste de existencias negativo por importe de 13 millones de euros.
Estos resultados se enmarcan en un contexto de mercado marcado por la continúa presión de las importaciones y las incertidumbres macroeconómicas en Europa y la persistencia del exceso de oferta en Asia, donde estima que los precios permanecerán bajos, según el grupo acerero.
"En el lado positivo, esperamos que se mantenga la fortaleza del mercado americano, principal mercado de Acerinox", ha explicado la compañía en las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en las que subraya que los precios de las materias primas siguen siendo "muy volátiles", lo que supone una "complicación añadida" a la gestión del negocio.
A pesar de las difíciles condiciones de mercado y la desaceleración estacional en Europa, Acerinox confía en lograr en el tercer trimestre un ebitda similar al del segundo trimestre, en el que alcanzó los 97 millones, con una mejora interanual del 7%.