Seis meses antes de lo previsto, Iridium (ACS) ha terminado las obras del nuevo complejo fronterizo Los Libertadores, en Chile, ha informado la empresa.
De esta forma, las instituciones chilenas han tomado posesión del complejo, iniciándose así una etapa de pruebas para su definitiva apertura al público, que se prevé que se produzca en tres meses.
Con esto, la empresa da comienzo a la etapa de operación, ha informado en un comunicado.
El nuevo complejo, mejorará el control transfronterizo y permitirá agilizar el flujo de mercancías en uno de los pasos más transitados de Los Andes. Y es que este triplica su cpacidad de atención de turismo y al tráfico de camiones, reduciendo unas esperas en la frontera que, en algunos casos, alcanzaban las seis horas.
Adjudicada en 2015
La concesión fue adjudicada en marzo de 2015 a Iridium por la República de Chile y el inicio del diseño y construcción de la obras tuvo lugar en mayo de ese mismo año.
El puesto fronterizo se ubica a casi 3.000 metros sobre el nivel del mar en territorio chileno, en la ruta que une Mendoza, en Argentina, con la Región de Valparaíso, en Chile.
Está constituido por tres edificios principales situados en una plataforma de hormigón de 40.000 metros cuadrados destinada al tránsito de los vehículos. Estos edificios albergarán tanto el control fronterizo como el edificio residencia para los funcionarios subcomisaria del Cuerpo de Carabineros de Chile con una superficie total construida que supera los 35.000 metros cuadrados.
El diseño y ejecución de la obra a esta altitud ha supuesto constantes desafíos entre los que destacan la cubierta del edificio principal de madera laminada y preparada para soportar una sobrecarga de nieve de 1.400 kilos y trabajar por debajo de los 15 grados bajo cero.