Apenas dos días ha durado la tregua de los mercados a Bankia en particular y el sector financiero en general. Tras los moderados avances del miércoles y el jueves, los títulos del banco que preside José Ignacio Goiriolzarri caían hoy con fuerza en un entorno en el que los inversores vuelven a especular con nuevos estímulos de los bancos centrales ante la incertidumbre económica.
En concreto, los acciones de Bankia retrocedían al cierre más de un 4% hasta quedarse en 1,73 euros dentro de un Ibex 35 que a la misma hora se dejaba un 1,3% alejándose de nuevo de los 9.000 puntos.
Al igual que otros valores de la bolsa española, Bankia se ve muy afectado por el pesimismo que inunda el mercado después de que ayer el presidente de EEUU, Donald Trump, anunciase nuevos aranceles 10% a partir de septiembre sobre 300.000 millones de dólares en productos importados de China.
Este recrudecimiento de la guerra comercial entre EEUU y China vuelve a dibujar negros nubarrones sobre la economía mundial, alimentando la especulación de más estímulos de los bancos centrales. En sus últimas reuniones de política monetaria, el BCE preparó el terreno para un recorte de tipos en septiembre mientras que la Fed estadounidense hizo su primer recorte en nueve años –de un cuarto de punto-, pero en ambos casos los mercados habían augurado un poco más. Ahora parece que el terreno es otra vez propicio para que saquen toda su artillería.
Por si fuera poco, los analistas de Berenberg han recortado hoy el precio objetivo de Bankia desde 1,75 a 1,55 euros. Este nuevo precio supone un potencial bajista de casi un 15% para la entidad respecto al cierre de ayer.
Las acciones de Bankia se han dejado en lo que va de año más de un 30% de su valor en bolsa, alejándose cada vez más de los precios que permitirían al Estado recuperar el dinero del rescate. El banco anunció este lunes que obtuvo un beneficio neto atribuido de 400 millones de euros durante el primer semestre de 2019, un 22,3% menos respecto al mismo periodo del año anterior.