El 2019 pasará a la historia como uno de los peores años para las aerolíneas europeas. Desde que empezó el ejercicio, la mayoría de estas empresas han visto descender sus beneficios respecto al año anterior y perder valor en bolsa.
Entre los factores que explican esta caída se encuentran la reducción de su negocio y factores geopolíticos como el brexit. Es por esto último que los grupos británicos son los que más valor pierden, alcanzando descensos de hasta el 84% en el caso de Thomas Cook.
Al inicio de 2019, las acciones del grupo de viajes con sede en Reino Unido se intercambiaban a 36,59 euros y la empresa tenía una capitalización bursátil de 553 millones de euros. A 30 de agosto, estas se intercambiaban a 5,65 euros y el valor de la empresa alcanzaba los 83 millones de euros. De esta forma, la empresa ha perdido 470 millones de euros de valor.
Se trata de un desplome cuyo origen se encuentra en los tres profit warning presentados durante el pasado ejercicio y el pesimismo con el que los inversores miran a la empresa, ya que estos piensan que que su situación económica es peor de lo que se pensaba.
Lejos de Thomas Cook, pero con descensos considerables, se encuentra IAG. El holding formado por British Airways (BA), Iberia, Vueling y Aer Lingus se ha dejado un 29,4% de su valor hasta el último día de agosto, pasando de cotizar los títulos a 6,68 euros a cierre del 2 de enero a los 4,66 euros con los que cerró la sesión la pasada semana, reduciendo su cotización bursátil desde los 13.306 millones de enero hasta los 9.282 euros con los que cerró la sesión el pasado viernes. Eso son 4.000 millones menos que en última sesión de agosto.
Sin embargo, no todas las aerolíneas o grupos británicos han visto reducirse su valor en más de un cuarto. EasyJet ha sido la compañía que ha registrado un comportamiento menos a la baja con un 11,3%. Y es que, mientras el precio de sus acciones se situaba en enero de este año en los 1.212 euros, a cierre de agosto su valoración cayó hasta los 1.059 euros. De esta forma, su capitalización bursátil se redujo en 2.387 millones de euros.
Otras europeas
Pero también aquellas que tienen su sede fuera del Reino Unido han visto como su valor se desplomó en lo que va de año. Las acciones de Lufthansa se intercambian a un precio un 29% más bajo que a inicios de 2019. Y es que, mientras el 2 de enero sus acciones tenían un valor de 19,77 euros, a cierre de agosto no llegaban a los 14 euros, reduciendo la capitalización bursátil de la empresa en más de 2.800 millones hasta los 6.610 millones.
Menos notable, pero también importante, ha sido la caída del valor de Ryanair. Los títulos de la aerolínea cerraron el primer día de mercado del año en los 10,52 euros frente a los 9,17 euros que alcanzó el pasado viernes. De esta forma, la empresa pasó de tener una capitalización bursátil en enero de 11.667 millones hasta los 10.240 millones con los que cerró la semana pasada. Es decir, cerca de 1.400 millones de euros menos.
Precisamente, el negocio de la aerolínea irlandesa ha sufrido por el aumento del precio del combustible y los efectos del brexit ya que en el primer trimestre del ejercicio, estos aspectos, junto con la subida de los costes de personal y las agresivas tarifas impuestas en los últimos meses, redujeron su beneficio un 21% hasta los 243 millones de euros.
Solo dos en positivo
La situación de estas aerolíneas y grupos turísticos contrasta con la de otras dos de las líneas aéreas más importantes, Air France-KLM y Aeroflot. Ambas han aumentado su capitalización bursátil desde que empezó 2019.
La primera de ellas elevó su valor en bolsa un 10,5% desde que se inició el año, pasando de los 9,28 euros por acción del 2 de enero a los 10,25 euros por título con los que cerró el mes de agosto. Eso le ha permitido alcanzar una capitalización bursátil de cerca de 4.400 millones de euros, unos 415 millones de euros más que a principios del ejercicio.
Aeroflot, por su parte ha elevado su valor en un 8,5% en los primeros ocho meses del año. La compañía ha pasando de los 1,38 euros de enero a los 1,50 euros con los que cerró la jornada bursátil el 30 de agosto. Un buen comportamiento que le ha permitido elevar su capitalización en más de 124 millones de euros.
Las aerolíneas aseguran que no temen ni a la subida del precio del combustible ni a las trifulcas geopolíticas. Confían en que su actividad volverá a la normalidad, pero el mercado no opina lo mismo. De las principales aerolíneas europeas en función de los ingresos por pasajeros transportados por kilómetro en mayo de 2019, solo dos han aumentado su valor en bolsa. Las demás (IAG, Ryanair, Lufthansa, Thomas Cook, easyJet) perdieron más de 11.300 millones de euros en total.