Facebook le da una nueva vuelta de tuerca a sus servicios. La plataforma lanzó el pasado jueves en Estados Unidos Facebook Dating, su propio servicio de citas con el que pretende emular y hacer competencia al popular Tinder. Una plataforma que lanza en medio de las críticas por sus fallos de privacidad y tras una multa histórica de 5.000 millones, por el escándalo de Cambridge Anatytica, precisamente en Estados Unidos.
La Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos (FTC, en sus siglas en inglés) aprobó a mediados de julio sancionar a la red social con 5.000 millones de dólares (4.436 millones de euros) por haber violado las reglas de privacidad de sus usuarios en el caso Cambridge Analytica. La tecnológica ya llegó a un acuerdo en noviembre 2011 con las autoridades de EE UU, tras admitir que engañó a los consumidores al decirles que protegía su información cuando en realidad la compartía sin informarles.
En el caso de este nuevo servicio, Facebook promete “medidas reforzadas de privacidad y seguridad” que desvinculan el perfil de la red social principal y permiten compartir los detalles y la ubicación de una cita con contactos de confianza. Facebook Dating es un servicio asociado a la red social principal, pero que requiere la creación de un perfil nuevo.
Los usuarios pueden integrar además sus publicaciones de Instagram, así como añadir seguidores de Instagram y amigos de Facebook a su lista secreta de contactos en los que está interesado. Este servicio "hace más fácil encontrar el amor a través de lo que te gusta", explican desde Facebook, y a "crear relaciones significativas" a través de los que se tiene en común.
Dos redes completamente separadas
No obstante, señalan que "encontrar una pareja romántica es profundamente personal", y por ello han reforzado las medidas de privacidad y seguridad. En este sentido, el servicio de citas es una experiencia externa a Facebook, y que quienes quieran usarlo tendrán que elegir crear específicamente un perfil en él, que puede ser eliminado en cualquier momento.
Esta separación se refleja también en los contenidos. La actividad de los usuarios en Dating no aparecerá en el newsfeed ni el perfil de la red social principal. Los amigos de Facebook no sabrán si el usuario tiene un perfil en el servicio de citas, a menos que se lo diga. La gente que el usuario verá en Dating "serán personas sugeridas por él, las personas que le han sugerido y las personas que ha añadido a la lista de intereses secretos".
Los perfiles muestran el nombre y la edad de la persona de forma predeterminada, pero el usuario puede configurar si quiere que los demás vean información relativa a la identidad de género u orientación sexual, las personas en las que está interesada o las fotografías. Y en caso de que el usuario llegue a quedar con un contacto de Dating, el servicio permite compartir detalles del evento o del lugar donde van a ir o la ubicación del mismo a contactos de confianza a través de Messenger.
Con todo, parece difícil confiar en una red de citas de Facebook, con los antecedentes del gigante tecnológico de escasa protección de los datos de los usuarios. La información sentimental es particularmente sensible y Facebook ya ha dado sobradas muestras de que no protege con el necesario cuidado la información privada. Un gran hándicap para el éxito de esta nueva iniciativa.