El personal de tierra de Iberia ha convocado este lunes ocho jornadas de huelga en todos los aeropuertos españoles entre los meses de septiembre y noviembre. Los trabajadores de la aerolínea han anunciado estos paros como respuesta a la decisión de la aerolínea de suspender las negociaciones del convenio colectivo para la plantilla de 'handling'.
En concreto, los paros están previstos para todos los lunes entre el 30 de este mes y el 18 de noviembre, según han confirmado los sindicatos de la compañía. Desde UGT, la organización convocante, aseguran que esta decisión se toma después de que haya vencido el plazo que dieron a Iberia para "restablecer y finalizar inmediatamente" la negociación y "ante la falta de respuesta" de la compañía.
Queda pendiente ahora la mediación del Servicio de Intermediación y Arbitraje (SIMA), última oportunidad antes de la convocatoria oficial de huelga.
Los sindicatos han registrado esta convocatoria "como respuesta a la decisión unilateral de la aerolínea de suspender las negociaciones del XXI Convenio Colectivo de Tierra". En un comunicado, la UGT considera que la "mala fe negociadora" (por parte de la empresa) está condicionando la negociación.
Consideran también que los trabajadores de Iberia merecen una propuesta global de la empresa, "pero no sólo con medidas de carácter económico sino, también, con medidas de carácter social tales como conciliación, dignificación de la jornada y del empleo, planes de carrera".
La dirección de Iberia trasladó el pasado jueves 5 de septiembre en la mesa de negociación a los representantes de los trabajadores que suspende temporalmente la negociación del XXI Convenio Colectivo de Tierra por la sucesión de las huelgas que se han producido en los aeropuertos de Barcelona, Bilbao y Madrid, así como la convocatoria en Málaga.
Respuesta de Iberia
La compañía señala en un comunicado que "a pesar de los continuos días de huelga convocados" ha seguido negociando con el objetivo de cerrar un acuerdo que permita "mejorar las condiciones de los trabajadores y dar estabilidad y futuro a los negocios de servicios aeroportuarios y de mantenimiento".
Iberia considera que "no puede" continuar negociando un convenio colectivo bajo el principio de buena fe "sometida al chantaje permanente de huelgas que lesionan los intereses de las aerolíneas a las que atienden" y que afectan a los clientes.
La compañía destacó que durante la negociación había puesto en la mesa "una batería de propuestas que hace de este convenio colectivo uno de los mejores de la historia para sus empleados", con una propuesta salarial "muy significativa" del 2,5% consolidado y 1% no consolidado para 2018; del 2% consolidado y del 1,5% no consolidado para 2019, así como una subida salarial ligada al ratio Ebit/ingresos para 2020 y 2021
Alta temporalidad
Según ha explicado a EL ESPAÑOL el responsable federal del Sindicato Aéreo de UGT, José Manuel Pérez, a este diario "faltan cosas importantes que deben completar el convenio colectivo".
Estas cosas son mejorar las condiciones de jornada de los trabajadores y mejoras salariales.
El responsable sindical explica que cuando firmaron el anterior convenio colectivo, en 2014, acordaron "una importante rebaja salarial y determinadas concesiones muy importantes en cuanto a la distribución de la jornada".
Ahora, cinco años después de ese convenio, la empresa ha obtenido buenas cifras en sus resultados y el sindicato entiende que "el convenio tiene que ser bueno en cuanto a la recuperación salarial y de las condiciones esenciales" con el objetivo de "aliviar la precariedad de buena parte de los contratos".
Y es que, según afirma Pérez, hay una diferencia gigantesca entre los diferentes tipos de contratos. Para empezar, uno de los principales problemas que tiene el personal de tierra es que tienen "un alto porcentaje de plantilla temporal que crece todavía más en las temporadas altas". A ello cabe añadir un porcentaje también elevado de trabajadores a tiempo parcial.
Según el responsable sindical, a ese grupo de trabajadores se les somete a "un montón de irregularidades en su jornada, lo que lleva a una incertidumbre sobre su futuro", por lo que piden normalizar su situación.
De esta forma, UGT confía en que "la empresa recapacite" con la huelga y "retome las negociaciones" para poder firmar cuanto antes el convenio colectivo.