La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha rechazado la solicitud de Mediaset y Atresmedia de una última vista oral para intentar frenar la multa cercana a los 90 millones de euros (45 millones para cada uno), que prepara el regulador para los dos grandes grupos audiovisuales. Una investigación abierta por entorpecer la entrada de terceros canales al mercado de la publicidad de televisión.
Las fuentes consultadas por EL ESPAÑOL indican que esta petición formulada antes del verano no tenía ninguna base jurídica ya que reiteraba la solicitud de terminación convencional que ya fue rechazada en mayo de este año.
Este era el último paso que le quedaba al expediente empezado hace más de 19 meses y mediante el cual la CNMC ha investigado las prácticas anticompetitivas de las dos cadenas de televisión. Las fuentes consultadas por este diario indican que al cerrarse este último trámite el expediente se fallará en los próximos días y que el anuncio oficial de la multa se realizará de manera inminente.
Falta solamente la ratificación del expediente por el consejo de la CNMC que deberá aprobar el pliego final en el que se incluyen las principales conclusiones y la propuesta de multa. EL ESPAÑOL ya contó que la Comisión Europea también dio el visto bueno al expediente y, por tanto, se han cumplido todos los trámites formales para hacerlo oficial.
No habrá cártel publicitario
De hecho, la CNMC ya pidió a los dos grupos de televisión la declaración formal de sus ingresos de explotación del año 2018, la base del cálculo de la multa que, en principio, afectará a entre el 4% y el 5% de su facturación total.
El expediente no optará a la multa máxima correspondiente al 10% de sus ingresos porque no se tramitará como falta muy grave, es decir que no se considerará que los dos grupos estén incurriendo en el cártel publicitario, pero sí que han perjudicado la entrada de terceros al mercado publicitario con sus prácticas anticompetitivas.
Batalla judicial
Durante el último lustro estas dos cadenas han aglutinado el 85% de la publicidad en televisión y el 95% de la publicidad de las televisiones en abierto. Una anomalía ante la que la CNMC abrió un expediente en febrero del año pasado.
Competencia investigó la existencia de una pauta única para obligar a los anunciantes a invertir en terceras cadenas, exigencia de cuotas publicitarias y penalizaciones si no se cumplían determinados baremos a las agencias de medios. Finalmente se han demostrado todas estas prácticas excepto que los dos grupos estuviesen de acuerdo en pactar precios y condiciones publicitarias.
Con el anuncio de la multa se abrirá ahora una larga batalla legal, ya que las dos cadenas han confirmado que recurrirán el fallo hasta las últimas consecuencias. El proceso se puede alargar al menos cuatro años en la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo, aunque es probable que la CNMC se asegure en su fallo que las cadenas provisionen en sus cuentas estas sanciones y cesen con sus prácticas de manera inmediata.