Visa, Mastercard y otros socios financieros que se han unido para construir la red de pagos de Libra, la criptomoneda de Facebook, están reconsiderando su participación el proyecto. La decisión se ha tomado tras una reacción violenta de los funcionarios del gobierno de EE. UU. y Europa, según ha publicado el diario Wall Street Journal.
Las deserciones podrían poner en peligro el intento de Facebook de persuadir a los consumidores para cambiar sus monedas nacionales por la digital. Y es que, como publica el diario norteamericano, sin una red de socios financieros que ayuden a transferir monedas a Libra, su alcance sería limitado.
Cuando Facebook dio a conocer el proyecto en junio, dijo que Libra podría cambiar todo el sistema financiero, ofreciendo a los consumidores una nueva forma de mover el dinero.
En ese momento, la empresa que preside Mark Zuckerberg esperaba proporcionar servicios financieros básicos a personas que carecen de cuentas bancarias y ahorrar alrededor de los 22.887 millones de euros "perdidos por los migrantes cada año a través de las remesas".
Ambiciones en el proyecto
Esta renuncia tiene a Facebook en vilo y luchando para mantener su criptomoneda. Tanto es así que los ejecutivos de las más de dos docenas de patrocinadores de Libra, un grupo llamado Asociación de Libra, han sido convocados a una reunión en Washington.
Facebook, que trabajó en secreto durante más de un año para desarrollar Libra, tiene amplias ambiciones para el proyecto. Muestra de ello es que Libra podría ofrecer un medio para proporcionar servicios financieros a través de comunicaciones más privadas y encriptadas.