Telefónica ha advertido del riesgo financiero que para su negocio puede representar la incertidumbre por las futuras políticas económicas que se ejecutarán en España a partir del año 2020. En su folleto continuado de emisión, remitido este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la operadora ha realizado un análisis pormenorizado de los peligros que se ciernen sobre la compañía en todos los mercados en los que opera.
Estamos hablando de un documento que se envía a inversores que respalda la emisión de bonos de la compañía, por lo que es clave identificar cuáles son los factores de riesgo sobre su negocio. En el caso de España, Telefónica advierte tres focos de incertidumbre.
El primero tiene que ver con la situación política en Cataluña y su impacto en las condiciones de financiación de la economía española, dado el calendario exigente de vencimientos "que todavía afronta el país" y "la notable dependencia al escenario e inversiones internacionales".
El segundo punto es la incertidumbre sobre políticas económicas a ejecutarse de 2020 en adelante "dada la elevada fragmentación política existente y la falta de acuerdos en telas claves". Finalmente, Telefónica advierte de que cualquier revisión proteccionista puede tener implicaciones significativas en España, al ser uno de los países más abiertos hacia el exterior desde el punto de vista comercial.
En cualquier caso, en Europa el mayor riesgo es Reino Unido tras el brexit. "Inversión, actividad económica y empleo serían las 'principales variables afectadas, así como la volatilidad de los mercados financieros, lo que podría condicionar el acceso a los mercados de capitales. La situación podría empeorar dependiendo del resultado final, que podría llevar a aun aumento de los conflictos regulatorios y legales en materia fiscal, comercial, de seguridad y de empleo".
En cuanto a Europa, el folleto de Telefónica advierte del encarecimiento de las condiciones de financiación tanto para el sector privado y público con un impacto negativo en la renta disponible debido a un escenario de stress financiero. "El catalizador de este escenario podría ser la situación de incertidumbre que rodea la sostenibilidad de las finanzas públicas en Grecia, pero sobre todo en el caso de Italia".
En todos los países en los que opera
En términos globales, la compañía indica que el deterioro económico y político puede afectar negativamente al negocio de los países en los que opera. "Desarrollos adversos en estos países, la mera incertidumbre o posibles variaciones en los tipos de cambio, o en el riesgo soberano pueden afectar negativamente al negocio de Telefónica, a la situación financiera, a los flujos de caja y a los resultados de operaciones y/o la evolución del algunas magnitudes financieras del grupo".
La compañía también identifica riesgos relativos al negocio como la consolidación del mercado, "así como operaciones de fusiones, adquisiciones, alianzas y acuerdos de colaboración con terceros", como por ejemplo la posible integración de las empresas del sector de contenidos como FOX y Disney y ATT con Time Warner, pueden afectar a la posición competitiva de Telefónica y a la eficiencia de las operaciones e incluso a la continuidad del negocio.
Por otro lado, el incremento de la competencia en algunos mercados, la entrada de nuevos competidores en mercados donde opera, o la fusión de operadores puede afectar a la posición competitiva, impactando negativamente en la evolución de ingresos y el la cuota de clientes.
"Estos cambios en la dinámica del mercado pueden derivar en ofertas comerciales agresivas, la aceleración del despliegue de banda ancha por parte de la competencia o la proliferación de tarifas de datos ilimitados. Situaciones que presentan una mayor relevancia en países como Chile, México y Perú".